La empresa Airbus presentó su "taxi volador" para 2023
Durante una cumbre sobre los desafíos del cambio climático que enfrenta el sector aviación, en Francia
El fabricante aeronáutico Airbus tiene un proyecto que crea un helicóptero eléctrico para trasladar hasta a 4 personas dentro de las ciudades, una especie de "taxi aéreo" que no emite gases contaminantes.
Este tendría una velocidad de 120 kilómetros por hora y con una capacidad de alcance de vuelo de hasta 80 kilómetros. Los ingenieros de Airbus calculan que el primer prototipo verá la luz en 2023.
El objetivo de las naves es aportar una alternativa de movilidad sostenible en la ciudad, sobre todo aquellas que tienen gigantescos problemas de tráfico y contaminación.
"Esta es la primera vez que realmente fabricamos un vehículo que vuela pero tiene cero emisiones a nivel operativo. Estamos trabajando con baterías para asegurar que no haya emisiones de CO2", apuntó el consejero delegado de la empresa. Guillaume Faury.
Lo cierto es que estos helicópteros para 4 personas no podrán aterrizar en cualquier lugar sino tendrán que crearse espacios especiales para acondicionar su uso.
Avión de hidrógeno
Por otro lado, Airbus apuesta fuerte por el avión de hidrógeno para descarbonizar la aviación a largo plazo, cada vez más criticada por su responsabilidad en el cambio climático, pero considera que en los próximos años los avances vendrán por la reducción de emisiones con tecnologías ya probadas.
Su consejero delegado, Guillaume Faury, se reafirmó este miércoles en su proyecto de avión de hidrógeno presentado hace un año, que debería convertirse en una realidad en el horizonte de 2035, primero con aparatos de corta y media distancia, porque técnicamente "el hidrógeno está hecho para la aviación".
En una "cumbre" sobre los desafíos del cambio climático para el sector de la aviación, organizada en la sede del grupo europeo en Toulouse, en el sur de Francia, Faury puntualizó que para que funcione en la aviación, el hidrógeno tiene que avanzar mucho en otros sectores y obtenerse con energías renovables.
El despliegue del avión de hidrógeno dentro de una quincena de años sería progresivo, con lo cual los de motores convencionales que operan o salen al mercado ahora todavía tendrían muchos años de vida activa, con su corolario de emisiones.
Pero para Airbus eso no es un problema insalvable en el objetivo que se ha autoimpuesto el sector aeronáutico de alcanzar un nivel de cero emisiones netas de dióxido de carbono (CO2) para 2050. Es más, considera que una de las grandes prioridades es reemplazar los aviones más antiguos por los de nueva generación, que permiten un ahorro de carburante por pasajero de al menos un 20 %.
Con información de EFE