Jefferson Farfán: "Hoy le tocó a mi hija, pero mañana podría ser a otros"
El exfutbolista se pronunció en sus redes sociales y exhortó a las autoridades a tomar medidas contra la delincuencia
A través de una historia en su cuenta de Instagram, el exfutbolista Jefferson Farfán se pronunció por el robo del que su hija Maialén Farfán fue víctima la noche del último jueves 28 de septiembre, y exhortó a las autoridades tomar cartas en el asunto para acabar con esta ola delictiva que amenaza al país.
“Con relación al robo del cual ha sido víctima mi hija Maialén Farfán informo lo siguiente: Esta noche un grupo de sujetos armados pusieron en peligro la integridad de mi hija. Los delincuentes la amenazaron con una pistola. Hemos realizado las denuncias respectivas en la comisaría de la zona", inicia el comunicado de Farfán.
"Sin embargo, debo indicar que, si bien hoy le pasó esto a mi hija, día a día miles de hogares peruanos sufren hechos similares que ponen en constante riesgo la salud e integridad de nuestros hijos. Por ello, exhorto a que las autoridades respectivas tomen medidas inmediatas para luchar contra la delincuencia. Hoy le tocó a mi familia, pero le puede tocar a otros jóvenes y quizás no tengan la suerte de mi hija de quedar con vida”, añade el comunicado de Jefferson
Farfán agradeció el apoyo y preocupación de sus seguidores.
“Finalmente, agradezco a todos por el apoyo y la preocupación. Solo pedimos justicia y que se capturen a los delincuentes. Recordemos siempre que justicia que tarda no es justicia”, finalizó el exfutbolista.
El asalto a Maialén Farfán
El último jueves a las 20:20 de la noche, Maialén Farfán fue víctima de asalto a mano armada por un grupo de delincuentes que descendieron de una camioneta negra en la cuadra 8 de jirón Tomasal, en la urbanización Las Casuarinas en el distrito de Surco.
La joven universitaria de 18 años se encontraba transitando con su amiga identificada como Luciana Moreno Zegarra y ambas fueron encañonadas para entregar sus pertenecías a los hampones quienes además solicitaron las claves de sus tarjetas bancarias y huyeron con los equipos celulares y joyas de las víctimas.