Policías reciben 12 meses de prisión preventiva por extorsionar a una mujer

Es la tercera vez que Melina Cordero hace esta ruta, desde Comas hasta la sede de la Dirincri en la avenida España. Aun siente angustia de llegar, y es que esta mujer de 24 años, madre de 2 pequeños de 6 y 2 años, las veces anteriores llegó cargando entre sus cosas mucho dinero y un gran temor. Acudió hasta esta sede policial para concretar el pago de una extorsión de la que venía siendo víctima.

No es cualquier sujeto, es el brigadier Rower Reyes Palacios, un policía con 34 años de servicio y segundo al mando del equipo 2 del departamento 1 de la División de Robos de la Dirincri. También es uno de los 2 policías que esta mujer señala de haberle pedido 6 mil soles a cambio de la libertad de su marido. 

Conversan por unos instantes hasta que aparece en escena otro policía, que Melina lo señala como el cómplice de Reyes. Se trata de Luis Alberto Vílchez Helfers, instructor de la policía, también del equipo 2 del departamento 1 de la División de Robos y justamente el instructor a cargo del caso del esposo de Melina, Bryan Rodríguez Ramos, acusado de participar en el asalto a un camión con un mototaxi.

Minutos después del encuentro deciden ingresar a la sede de la Dirincri. Al interior, sin testigos, entre los pasadizos de la sede policial, Melina Cordero asegura que entregó dinero a los policías en 2 oportunidades. En una primera entrega 4 mil soles y en la siguiente otros 1500 soles.

Era la tarde del 28 de julio pasado y un mototaxi con 3 sujetos a bordo detiene su paso y aprovecha el momento en el que un camión descargaba mercadería en una calle de Comas. Los delincuentes armados cubren sus rostros con cascos y entran en acción: golpean a las ocupantes, los amenazan y se llevan todo lo que encontraron, suben al mototaxi y se marchan.

La propietaria de ese mototaxi es Melina Cordero, una mujer que se gana la vida vendiendo comida en la puerta de su casa y que ahora ha tenido que vender lo poco de valor que tenía para salir del problema al que dice se ha metido por ayudar a un venezolano a quien, asegura le alquilo su moto por un acto de humanidad 

Sin ningún contrato, ni documento de por medio y sin siquiera conocer su verdadera identidad, Melina le alquiló el mototaxi. Asegura que durante un mes el venezolano cumplió pagando 20 soles diarios por el alquiler. Todo parecía marchar con normalidad hasta que un día desapareció con el mototaxi.

Acudió al taller a recoger la moto junto a su esposo, Bryan Rodríguez de 22 años. Pero Bryan tenía antecedentes por robo agravado y el equipo de la Dirincri a cargo de este caso lo sabía y ya le seguían los pasos. 

Melina desesperada,  sin dinero y con sus 2 pequeños y ahora sin el mototaxi,  no sabía qué hacer. Decidió ir hasta la Dirincri para convencerlos de que no podía cumplir con el pago solicitado.

Ella pensó que la pesadilla había terminado. Volvió a casa esperando que suelten a su esposo por falta de pruebas, pero lo que no sabía es que la extorsión no había terminado.

Esta vez se sentía desamparada. Ya no podía acudir a sus vecinos para prestarse dinero. Ya no le quedaba nada por vender , entonces se armó de valor y decidió denunciar.

El operativo estaba en marcha, Melina debía acudir a la cita con los billetes y entregarlos a los policías. Sin embargo, los agentes experimentados se cuidaron de dejar huella: no recibieron el dinero en la calle, nuevamente quisieron que fuera sin testigos. Melina entregó el dinero cerca al baño, e inmediatamente después fue obligada a abandonar el local de la Dirincri.

Solo minutos después, el titular de la Primera Fiscalía Especializada en Delitos de Corrupción intervino la oficina de robos. 

Se apaga la luz de la oficina para lograr identificar el color verde del reactivo en las manos o en el cuerpo de quienes hayan tenido contacto con los billetes impregnados con la sustancia. Los integrantes de la Fiscalía fueron en busca de Vílchez.

Las evidencias seguían apareciendo, pero Rower Reyes negaba todo. Le encontraron 1890 dólares y 700 soles en su billetera. Pero no tenían el reactivo, no eran los billetes que Melina había entregado 

Seguía la búsqueda de los billetes. Habían pasado más de 3 horas desde que se inició la diligencia y, pese a haber identificado el color verde en las prendas y manos de Vílchez y Reyes, el dinero que entregó Melina no aparecía, solo encontraron 2 celulares camuflados debajo de un puff de cuyos números se habían comunicado con la mujer extorsionada.   

Pese lo evidente, Reyes seguía negando que el celular le perteneciera. Eran más de las 9 de noche y la prueba del delito no se hallaba, seguían buscando y rebuscando cada rincón de la oficina mientras que el resto de los miembros del equipo de la División de Robos observaban callados. Hasta que después de casi 4 horas de insistir con la búsqueda apareció la evidencia. 

El Poder Judicial les otorgó a ambos policías 12 meses de prisión preventiva.

Melina Cordero teme represalias de quienes estarían coludidos con estos malos elementos de la Policía Nacional, quienes manchan el buen nombre de la institución y a quienes las autoridades policiales deben erradicar de raíz.