Permiso para soñar: Las posibilidades de la clasificación al mundial en Qatar
Para muchos, si de alentar a nuestra Selección se trata, no hay límite ni razonamiento que valga
Dicen que la fe es atreverse a dar el primer paso, aun cuando no se vea el camino completo. Para nuestra hinchada, la mejor del mundo, es la fe lo que le permite creer en la clasificación al Mundial en Qatar; no importa que a menudo la lógica y la aritmética le jueguen a la contra
Para muchos, si de alentar a nuestra selección se trata, no hay límite ni razonamiento que valga. Es la pasión más pura lo que impulsa a cada fanático hacia una peregrinación que nunca termina y que se refuerza después de cada pitazo inicial con la blanquirroja sobre sobre el verde.
Y es que cuando la hinchada besa la gloria en partidos como el del jueves último, todo se vuelve matemáticamente posible.
Las combinaciones y permutaciones de la estadística y el cálculo de fatalidades pasan a un segundo plano ante la magia del deporte rey. No hay fuerza capaz de tumbarse la exaltada lógica que nace de la euforia y la celebración.
Una realidad paralela alimentada a base de ilusión, una ilusión que, en el fondo, y con mayor o menor intensidad, moviliza en estos días a la gran mayoría de peruanos.
Contra Chile, nuestro clásico rival, siempre es una felicidad gritar un gol. o mejor dos. El primero lo puso Christian Cueva, el crack del partido
Cuando merecidamente llego el zapatazo de Sergio Peña, que también brilló esa noche, el equipo peruano estaba ya enseñoreado en la cancha.