El perfil de "La sicaria del Metro"
Esta mujer disparó a otra en la Estación la Cultura
Esta mujer que ve en pantalla, de rostro angelical y dulce mirada es en realidad una sicaria peruana de alto grado de peligrosidad. Una persona fría y calculadora, ella sería la ejecutora, la verdugo de una mafia de extorsionadores. Una asesina que no solo tiene tatuado el cuerpo, sino también las manos de sangre. Ella era quien portaba el chullo naranja y la que fue traída desde El Agustino para atentar contra esta tarjetera que se encontraba en la Estación La Cultura.
Con tan solo 24 años, Yolenca Fransua Cahuana Palomino, era una joven que cambiaba constantemente de apariencia para no ser reconocida. Acá podemos verla con uno de sus tantos looks, parecía otra persona, se había pintado el cabello, perfilado el rostro, lucía ojos de color celeste e incluso se había tatuado las cejas. Decía ser ambulante, dedicarse a vender mascarillas, pero ahora se sabe que es la presunta autora de varios ataques cometidos a mano armada, en distintos distritos de la capital.
En poco tiempo, podía pasar de rubia a castaña y en meses a morena. En más de un video se observa a la perfección cada una de sus transformaciones. A continuación, entérese con lujo y detalle del terrible accionar de esta sicaria narrado de la boca de la misma protagonista, cuya habilidad empuñando un arma no nació de la noche a la mañana.
Una historia que se viene abajo al corroborar el rosario de delitos que carga en sus hombros, ya que cuenta con antecedentes por hurto agravado y lesión dolosa. Además, tenía una orden de captura por el delito de sicariato emitido por el Juzgado Penal Unipersonal de Santa Anita.
A eso se suma que registraba investigaciones como menor infractora por receptación, tráfico ilícito de drogas y robo agravado con crueldad. Sin duda, toda una joyita que ahora tendrá que responder a las autoridades.