Niño de 7 años denunció a sus profesores por abuso sexual y tortura

Unos padres quisieran dar la cara y contar la pesadilla que viven, pero la ley se los impide, para proteger a su hijo de apenas siete años. Un menor que empezó a dar señas de que algo no andaba bien y que terminó acusando a sus profesores de abuso sexual y torturas. 

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Han pasado 25 días desde que su padre denunció el hecho y todos hasta ahora son presuntos culpables, por culpa de un nefasto sistema de justicia, que también ha trasmutado la vida de un pequeño en un infierno.   

“Lo que me dice mi niño es que la profesora lo recibe, le quita la mochila y lo duermen con medicamento y lo empiezan a hacer torturas horribles”, cuenta la madre del niño de 7 años que no puede ser identificada. 

La ley que protege al menor abusado también nos impide decir en qué parte del Perú ocurrió todo, por eso solo diremos que sucedió en el norte del país, en un soleado lugar donde estos padres quisieron forjar a sus hijos y darles paz. 

Durante tres años, parecía que todo se concretaba así, pero luego de que el niño les confesara el horror que vivía y ellos obviamente denunciaran el caso. La vida de esta familia se oscureció por completo.

Por un lado, están los que se han puesto en su contra defendiendo a los acusados y por el otro las autoridades que se quedan cortas para investigar a profundidad y condenar a los culpables en un caso tan delicado como este, de abuso infantil. 

“yo no sé qué clase de monstruo son, yo diré todo tal cual mi hijo me lo ha contado, el llora unas diez veces al día con su corazón en la mano, es impotencia la que tengo de no poder hacer nada”, narra el padre. 

El niño no estudiaba en un colegio regular y es que, para afinar sus talentos deportivos, sus padres decidieron que el menor recibiera clases particulares, el llamado sistema home school. Es así, que en agosto de este año fueron a un colegio del pueblo, en busca de una profesora particular para su hijo. 

Aseguran que el director de ese plantel, Orlando Guzmán, les recomendó a la profesora Ana María Alvarado Periche. Entonces acordaron, que en lugar de la casa familiar, las clases se dictarían en la casa de la docente, pues ella tenía otros alumnos a los que atender. 

Los padres dicen que durante un mes y medio no se percataron de nada extraño, hasta que a finales de septiembre, el niño hace una terrible revelación. 

“A él se le escapa un detalle que el profesor le toca el pie, le dijimos que nunca más va a regresar va esa casa y al sentarse habla y empieza a desarrollar toda la pesadilla que ha vivido”, narra la madre a Cuarto Poder. 

El profesor al que hace referencia es Henry Alva Castillo, esposo de la profesora Ana María Alvarado, a quien el niño ha sindicado como el hombre que lo torturaba y abusaba de él, en horas de clases.   

“Mi hijo dice que lo recibían de la mano y que en el segundo piso hay un baño y que ahí abusaban de él, que le enseñaban videos pornográficos, que lo iban a matar a él y a su papá si hablaba”, reveló la madre. 

El pequeño ha dicho también que cuando le pedía ayuda a la profesora Ana María Alvarado, ella simplemente se hacía la desentendida, dedicándose a grabar los abusos  cometidos por su esposo. 

Empezaba una doble pesadilla: la de saber que al hijo de uno lo han abusado y la de encontrar solo puertas cerradas: los padres acudieron rápidamente a la comisaria para poner la denuncia, pero ahí les dijeron que era competencia del Ministerio Público pero había demoras en tomar su caso.   

Ante tanta insistencia, aceptaron su denuncia. Cuando el pequeño pasó por el médico legista, terminaron por confirmarles lo que tanto temían: el pequeño presentaba lesiones antiguas en la zona genital.   

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Y más recientes en regiones extra y para genital. Se puede hablar sin duda de abuso sexual.  El niño también ha dado su versión al psicólogo legal.