La misma arma fue usada en dos homicidios
Dos crímenes que parecían aislados se entrelazan en una verdad escalofriante: la misma fue utilizada en ambos homicidios
Dos escenarios distintos, dos víctimas sin aparente vínculo. Crímenes que parecían aislados se entrelazan en una verdad escalofriante: la misma arma fue utilizada en ambos homicidios.
El hallazgo proviene de un informe pericial de balística forense que ha revelado que las balas que acabaron con la vida de Castillo y del profesor fueron disparadas desde el mismo revólver.
Este descubrimiento, lejos de esclarecer los hechos, ha tejido una trama aún más inquietante. ¿Qué conecta a las víctimas? ¿Quién está detrás de estos homicidios?
Las respuestas están detrás de una galería comercial ubicada en el emporio comercial de Mesa Redonda, exactamente en el jirón Paruro 1075. Una codiciada propiedad valorizada en más de 7 millones de soles.
Imágenes captadas por una cámara de seguridad los colocan a ambos en un mismo lugar. Son cámaras de seguridad de un centro de conciliación. Con pantalón beige y camisa blanca se observa al profesor Julio Pacheco. Minutos después ingresa Daniel Castillo. Es el último registro visual de él, horas antes de su asesinato. La tesis policial apunta a que ambos eran integrantes de una red que operaba con un modus operandi bien estructurado.
Identificaban inmuebles de alto valor cuyos propietarios habían fallecido. Falsificaban documentos de compraventa y transferían los bienes a nombres de testaferros. Castillo se encargaba de las conexiones legales mientras que el profesor actuaba como fachada para encubrir la apropiación ilegal de los bienes. Fue así que habrían intentado apropiarse de esta galería que es administrada por la Beneficencia de Lima que tenía un contrato de alquiler con la empresa Lima Futura SAC.