Keiko Fujimori: "Hay una persecución política y un circo por parte de un fiscal obsesionado conmigo"
Keiko Fujimori señaló que existe una "persecución política" en su contra por el caso Cócteles. Reiteró que no está involucrada en lavado de activos e indicó que "un fiscal" está "obsesionado" con ella y Fuerza Popular
A la salida de la sede del Poder Judicial, Keiko Fujimori denunció que hay una "persecución política" en su contra como parte de las investigaciones que se le sigue desde el Ministerio Público en el denominado caso Cócteles.
"Lo que hay es una persecución política y un circo por parte de un fiscal obsesionado conmigo y Fuerza Popular", expresó la excandidata presidencial ante la prensa tras participar en la audiencia que programó el Tercer Juzgado Colegiado de la Corte Superior de Justicia Nacional Especializada.
En otro momento, la lideresa de Fuerza Popular reiteró su posición de que no cometió ningún acto que pueda ser considerado como un probable lavado de activos durante la campaña presidencial de 2011 y 2016.
"¿Dónde está el lavado de activos? Pregunta que le han hecho todos los abogados. Ustedes van a poder darse cuenta a lo largo de estas audiencias. No existe lavado de activos", expresó Fujimori.
¿DE QUÉ SE ACUSA A KEIKO FUJIMORI Y FUERZA POPULAR?
El caso Cócteles comprenden una serie de investigaciones iniciadas el 2014 por parte del Equipo Especial de Fiscales del caso Lava Jato cuando se conoció que el partido Fuerza Popular habría recibido aportantes no declarados para su campaña, entre ellos de la empresa brasileña Odebrecht.
Esos recursos, según la Fiscalía, habrían sido justificados mediante actividades como cócteles en uno de los cuales Fuerza Popular dice haber recaudado más de un millón de dólares para la campaña presidencial, y mediante el “pitufeo”, es decir, el fraccionamiento de aportes en montos más pequeños para no levantar alertas de las autoridades.
La fiscalía, a cargo del fiscal José Domingo Pérez, también señala que Fuerza Popular habría recibidos aportes no registrados y en efectivo de diversos empresarios, entre ellos Dionisio Romero Paoletti, para su campaña presidencial de 2011.
De acuerdo a la acusación fiscal, se estima que Fuerza Popular habría recibido en forma indebida cerca de 17 millones de soles para ambas campañas presidenciales.