Fabrican huellas digitales para suplantadores en exámenes de universidades
Banda utilizaba insumos para la odontología para crear una lámina donde queda impregnada la huella de una persona
La aparición de los agentes de la división de estafas de la Dirincri tomó por sorpresa al cabecilla de la banda, un desesperado Manuel Pacheco Vargas, dedicado a fabricar huellas de personas en láminas para usos ilícitos.
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Un equipo de agentes del departamento de estafas y de la oficina de inteligencia desde hace semanas venían siguiéndole los pasos a la banda. Un video muestra encargado captando a dos estudiantes quienes se iban a colocar las huellas de los postulantes para dar el examen.
"Esto es pegado en los suplantadores cuando ellos pasan la máquina pasa como si fuera la persona que va al examen", explica el comandante Eduardo Hilario, jefe de la división de estafas de la Dirincri.
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Los postulantes cómplices del delito iban a pagar entre 4 y 5 mil dólares con tal de ingresar a la facultad de Medicina de la universidad Federico Villarreal. La policía ubicó la fábrica de huellas digitales en la urbanización Matazango, en la Molina.