Acusados del crimen de empresario son vinculados al rapto de odontólogo y otro caso más

Cinco meses después de su asesinato, con la captura de dos de los involucrados en el crimen, hoy salen a luz, nuevos detalles del secuestro y muerte del empresario Jesús Acuña Giodano, un próspero hombre de 51 años dedicado al negocio de los repuestos de vehículos y cuyo cuerpo fue arrojado en un jardín en los alrededores del Pentagonito, en San Borja.

Los chats demostrarían la insistencia y la agresividad con la que los secuestradores le escribían a los familiares del empresario al pedirles 300 mil dólares para no matarlo, aunque luego bajaron la cantidad. Según el coronel de la división de secuestros, Jorge Carpio, la intención de los captores siempre fue asesinar a su víctima.

En exclusiva, Domingo al Día revela los audios de las negociaciones durante los cuatro días de cautiverio, donde no solo enviaron pruebas de vida, sino también mensajes de voz.

En uno de los videos se muestra a un hombre sobre un colchón siendo asfixiado con una bolsa. Según, la policía, sería del empresario, Jesús Acuña Giodano. Las terribles imágenes fueron enviados por los secuestradores a los familiares.

Al parecer, habría más grabaciones donde es amedrentado, atormentado y vulnerado. En otras fotografías se puede ver a la víctima maniatado de sus extremidades, mientras su rostro revelaría las marcas de los golpes.

Las cámaras de la Municipalidad de San Borja captaron todo el recorrido que los secuestradores realizaron antes de arrojar el cuerpo inerte del empresario en las inmediaciones del Pentagonito.

Cinco minutos después de la primera imagen en la vía rápida, se ve a los mismos vehículos transitando por la Alameda Picaflor, adelante va la camioneta Toyota Prado, mientras que detrás se observa al automóvil negro. Luego de doce minutos dando vueltas, otra vez, aparecen en escena y sería el momento en el dejan los restos de su víctima.

Tan sólo hace unos días, la División De Secuestros de la Dirincri, capturó a dos hombres involucrados en el reglaje, secuestro y traslado del cadáver de la víctima. Sus nombres son Samir José Noureddine Molina y Francar José raño Sánchez, dos venezolanos que dicen recursearse manejando vehículos.

Este sujeto de polo rojo al que detienen en plena calle, sería el brazo logístico de la banda criminal, su nombre, es Francar o más conocido como Fran, un presunto delincuente de 34 años, quien es la persona, que consigue los vehículos para cometer los delitos.

Unidades que habrían sido utilizados para varios secuestros en la capital, y es que las investigaciones vienen develando que la misma banda que privó de su libertad al empresario Jesús Acuña estaría involucrada, también, en el secuestro del odontólogo Cristian Quispe Culqui del 18 de abril y del intento de rapto a la comerciante Lisett Angelica Cusqui Luis, del pasado 22 de junio en Los Olivos.

Todos los autos de contención utilizados en estos tres casos pertenecerían a Francar Reaño, uno de los capturados. Al igual que el carro blanco visto en San Juan De Lurigancho, como el Toyota negro, que vemos huyendo por las calles del distrito olivense y el changan por San Borja.

Algo que también guardaría relación para la policía, es que cuando fue encontrado el cadáver de Jesús Acuña Giodano, este presentaba tres agujeros en el pecho, la misma forma, en que acabaron con la vida del dentista, según las necropsias. Similitudes que haces sospechar a la policía, que se trataría de los mismos criminales.

Otro de los detenidos por el caso del empresario Acuña es Samir José Noureddine Molina, de 28 años, quien dice ser transportista de mudanza, pero que, en realidad sería el que maneja los autos a la hora de los secuestros y al momento de deshacerse de los cuerpos.

Incluso, este hombre, al parecer, es el que retira el dinero de las cuentas de los agraviados, tal como lo habría hecho, en el caso del dentista.

Ante las pruebas, el Poder Judicial de Lima Norte dispuso 15 meses de prisión preventiva, tanto para Francar como para Samir. Tiempo en que la fiscalía deberá investigar su participación en otros hechos de sangre. Mientras tanto, la policía viene intensificando la búsqueda, de Kleiverman Peña Fumero, otro venezolano implicado en el secuestro y crimen de Jesús Acuña Giodano.