Alberto Fujimori padece de males crónicos que requieren tratamiento permanente en lengua, corazón, columna vertebral y cadera

Alberto Fujimori, el ‘Pacificador’ para unos, o el ‘Genocida’ para otros, tenía 51 años y una salud vigorosa cuando en junio de 1990 se convirtió por primera vez en presidente del Perú.

Treinta y cuatro años después, con un nuevo tumor cancerígeno en la lengua, una rotura de cadera y 7 enfermedades crónicas, el condenado e indultado ha decidido que quiere ser presidente otra vez.

Hoy sabemos que el primer gran mal de Alberto Fujimori, un persistente tumor maligno en la lengua, lo persigue desde 1997, cuando era presidente. Aquel tumor fue operado y dominado por los mejores médicos de aquel Fujimori presidente. Un Fujimori que el 2000, con 61 años de edad y un cáncer superado, afrontó su tercera campaña electoral cuya historia terminó con él renunciando por fax.

Para el 2007 un extraditado Alberto Fujimori volvió al país y con apenas un año preso, el 2008, el cáncer en la lengua volvió a atacar.

Según los médicos consultados, Alberto Fujimori padece de males crónicos que implican tratamiento permanente en la lengua, el corazón, la columna vertebral, los huesos y la cadera con prótesis incluida. Es, lo que se llama en geriatría, un paciente frágil y complejo.

Cuatro de los cinco peruanos que fueron indultados el 2017 con Alberto Fujimori han muerto. Y a Fujimori lo quieren políticamente revivir para eventualmente convertirlo en el presidente más longevo de la historia del país.

Como bien dijo alguna vez una periodista: la historia ha demostrado que subestimar a los Fujimori es un error.