'Ajuste narco': La sangrienta escena del crimen en una residencia en Pachacámac
Dos extranjeros son los principales sospechosos de haber asesinado a cuatro peruanos narcotraficantes, un crimen relacionado a la reciente incautación de cocaína envuelta con símbolos nazis
Este gran muro ocultaba desde hace 2 semanas lo que ocurría en esta casa de campo de Pachacamac, una insospechada trama se tejía al interior de los amplios y cómodos ambientes de esta alejada estancia, habitada por 6 personas y elegida para esconder una aparente historia de drogas, deslealtad y delación, cuyo último capítulo decidieron cerrarlo tal y como se hace en el mundo del narcotráfico.
Al interior, lo hallado fue impactante: sangre por todos lados: en las paredes, en los muebles, decenas de casquillos de bala en el piso. Conforme los agentes de la policía ingresaban a los ambientes, iban descubriendo la dimensión del ataque.
En total, 4 cuerpos acribillados. Fueron encontrados desangrándose muy cerca, uno del otro. Los cadáveres tenían múltiples impactos en la cabeza y en el rostro, señales que, quizá, los asesinos dejaron para que otros puedan descifrar el mensaje.
Según una testigo clave, fueron 2 venezolanos los autores de esta masacre en Pachacamac. Las primeras hipótesis policiales apuntan a que los extranjeros eran los guardaespaldas de los cuatro hombres asesinados, de nacionalidad peruana. Todos parecen formar parte de una organización criminal dedicada al tráfico ilícito de drogas.
Un aparente ajuste de cuentas se maneja como la posible causa de este cuádruple crimen en Pachacamac. Una traición que no fue perdonada por el líder de una organización internacional dedicada al narcotráfico, quien habría ordenado a los venezolanos, acabar con los señalados como los delatores de un negocio narco.
Según las primeras investigaciones, este sangriento desenlace parece tener relación con una reciente incautación de droga en el puerto de Paita en Piura. La semana pasada se descubrió un cargamento de 50 bloques de cocaína marcados con una particular seña. La inscripción “Hitler” al interior de cada uno de los paquetes, mientras que en su envoltura se había colocado la esvástica nazi. La droga estaba oculta en los conductos de aire de un contenedor que venía en una embarcación procedente de Ecuador y que tenía como destino Europa. Este sería el origen de la matanza en Pachacamac, una traición que para ellos se paga con la muerte.
Lerry Jonatan Jaén Caldera, de 37 años, sería el hombre que estaba al mando en la casa alquilada. Había contratado una empleada del hogar por 15 días para trabajar en los quehaceres de esta casa. Una testigo relata, además, que Jaén Caldera fue el llevó a las otras 5 personas a vivir a la casa, entre ellos los 2 venezolanos que la policía asegura cometieron el crimen. Todos estuvieron instalados aquí desde hace 2 semanas.
Jaén Caldera registra antecedentes por tráfico ilícito de drogas y contra la seguridad pública. La tarde del 25 de mayo murió en el acto por múltiples heridas en la cabeza por proyectil de arma de fuego luego que los venezolanos atacaran al grupo de forma inesperada mientras que bebían y departían el jueves pasado.
Luis Miguel Arrece Quispe fue otro de los asesinados. No solo recibió varios disparos en la cabeza sino también en el tórax, abdomen, miembros superiores e inferiores. Junto a él se hallaron innumerables casquillos de bala.
Las 4 víctimas recibieron una ráfaga de balas como se describe en la necropsia. Camilo Junior Torres Huayhuata de 35 años recibió 2 disparos en la cabeza, 4 en el tórax, 3 en los miembros superiores y uno en las piernas. Torres Huayhuata está requisitoriado por tráfico ilícito de drogas, por tenencia ilegal de armas y delito contra el patrimonio.
James Palomino Vega murió por impactos de bala también en la cabeza. Tenía antecedentes por hurto agravado y delitos contra el patrimonio.
Lo vivido la tarde del jueves en esta alejada casa de campo todavía está en investigación. Testigos han dado detalles de lo ocurrido y la policía las maneja como importantes pistas para llegar a esclarecer el horrendo crimen. Cuatro muertes de prontuariados delincuentes que parece traicionaron los sanguinarios códigos en el mundo del narcotráfico.