Hoy:

    Vergara: "Nunca he estado en el lugar donde se encontró la droga"

    El congresista de Fuerza Popular respondió sobre su relación con el narcotraficante detenido Diego Sánchez Ospina

    Congresista Edwin Vergara. Foto: captura de TV

    El congresista fujimorista Edwin Vergara respondió sobre su relación con Diego Sánchez Ospina, un narcotraficante colombiano detenido en Lima con un importante cargamento de cocaína: casi una tonelada. Un reportaje de Cuarto Poder dio cuenta sobre el vínculo del legislador con este personaje que fue su socio hace algunos años, con el que formó una empresa de pinturas. 

    Usted ha dicho que ya pidió una suspensión de Fuerza Popular. ¿Es militante del partido?

    "No soy militante, es una suspensión a la bancada y al partido también".

    ¿Pero si no es militante, cómo puede ser que renuncie al partido?

    "Siendo miembro del CEN…lo que pasa es que si eres miembro del CEN te dan una militancia partidaria…".

    Ah, entonces sí es militante…

    "Así es".

    ¿Ya se hizo efectiva la suspensión?

    "Todavía, se pidió ayer y seguramente nos vamos a juntar para que se tome la decisión. Lo que quiero es ponerme al margen del partido, sé que es un tema político pero mientras menos político sea me va a permitir estar más tranquilo".

    ¿Esto fue pedido a iniciativa suya?

    "Sí, mía. No solo he pedido una suspensión temporal al partido sino que he enviado cartas a Procuraduría, al Congreso, al Ministerio Público para que se me levante todo, secreto bancario, de comunicaciones, etc. Este no es un tema menor".

    ¿Qué implica la separación? Usted sigue yendo al Congreso y votando…

    "Yo no estoy en discrepancia con mi partido. No estoy contaminado, lo que quiero es que (esto) no sea tan político. Yo estoy en la comisión de Educación, Reconstrucción y Producción. Mi labor va a seguir".

    ¿Cómo así se convierte en un amigo suyo Diego Sánchez?

    "Se formó una amistad en base a las conversaciones que teníamos. No nos veíamos muchas veces. Yo dije amigo pero no es que hablaba todos los días con él, hablaba muy pocas veces".

    ¿Pero cómo así se hace socio de alguien a quien ve pocas veces? Porque usted iba a invertir plata, tiene que existir confianza…

    "Como me pareció una persona correcta, a partir de las conversaciones, no me parecía que era una persona que tuviera que ver con un tema ilícito. Se iba a hacer un emprendimiento y los compromisos que asumimos él no complía".

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    ¿Qué lo persuade para formar con él una empresa?

    "Cada que teníamos oportunidad conversábamos, y nació de eso. Ahora, (yo) nunca sabía que (él) tenía doble vida. Hago la reflexión porque sabiendo que es una persona vinculada al narcotráfico uno no hace una empresa en un estudio, no va a una notaría, uno no se asocia con narcotraficantes. (En) el local donde se encontró la droga, yo nunca he estado ahí. Aporté a un local que nunca funcionó, ahí se iba a iniciar supuestamente el emprendimiento".

    ¿De qué tamaño era el negocio?

    "Era muy pequeño pero cuando empezamos a investigar el mercado de pintura queríamos hacer una empresa innovadora. Todas esas pinturas tenían como diluyente el agua. En 2014 y 2015 nunca funcionó la empresa porque nos mudamos. Yo invertí entre 40 y 50 mil dólares a lo largo del tiempo".

    ¿Qué determinó que dos años después decidiera salirse de la sociedad?

    "Al inicio hubo un desgaste de la inversión en el local y hubo un incendio. La Municipalidad del Callao no nos dio la licencia. Cuando se hace la inversión en el local y luego nos mudamos a Villa El Salvador ya yo me había desencantado del negocio: una de la inversión y la otra que no pudimos patentar un nombre".

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    ¿A cuánto le vendió sus acciones?

    "A 15 mil dólares. Perdí plata. Cuando nos mudamos la Municipalidad de Villa El Salvador tampoco nos quiso dar la licencia".

    ¿Y durante la sociedad usted en algún momento tuvo la sensación de que había algo fuera de lo normal en la conducta empresarial de su socio?

    "Me parecía un chico normal pero nunca vi algún tema que me diera sospechas de que estaba metido en algo indebido. Incluso me pagó por partes las acciones…Yo estaba agotado del tema".

    ¿De qué hablaban?

    "A veces hablábamos de fútbol, de política. Cosas de dos personas que se conocen".

    ¿Nunca le pidió ayuda para otro emprendimiento cuando ya era congresista?

    "Nunca. No suelo utilizar el cargo político para hacer eso. No me pidió nada. Yo me vi con Diego Sánchez una vez en Colombia después de la creación de la empresa. La primera vez que fui como congresista fui a un matrimonio de unos amigos con mi esposa. Luego fui en el avión de la Selección al partido de Perú en Barranquilla. El 18 de febrero al 24 fui a ver a estos amigos que tengo en Colombia. Con el señor Sánchez solo me vi una vez".

    ¿Y cuando Cataño se incorpora a la empresa como apoderado usted no se preguntó quién era?

    "Sí, se Googleó al señor pero como ya estaba de salida él (Sánchez) puso a esa persona y yo ya no lo cuestioné, yo puse a una chica que era la asistenta y que había trabajado un tiempo".