El reciente nombramiento de Eduardo Salhuana como presidente del Congreso ha suscitado una ola de preocupaciones y controversias.
En una declaración contundente, el flamante titular del Parlamento ha negado categóricamente cualquier vínculo con actividades ilegales.
Según el ex ministro del Interior, Carlos Basombrío, el pasado de Salhuana es condenable, destacando que proviene de una de las zonas más afectadas por la minería ilegal y que ha defendido esta actividad de diversas maneras, incluyendo la presentación de proyectos legislativos.
Por otro lado, otro ex ministro del Interior, José Elice, ha enfatizado la necesidad de que el nuevo presidente del Congreso ofrezca explicaciones al país sobre sus presuntos vínculos con la minería ilegal.
Menciona que Salhuana se ha reunido en numerosas ocasiones con mineros ilegales y ha promovido legislaciones que favorecen esta actividad, la cual, actualmente, supera al narcotráfico en importancia dentro de las economías ilegales del país.
El ex ministro de Energía y Minas, Carlos Herrera Descalzi, también ha expresado su preocupación por esta elección.
Subraya que una persona cercana a sectores involucrados en la minería ilegal, ya sea por razones profesionales o funcionales como congresista, genera inquietud.
Eduardo Salhuana es el nuevo presidente del Congreso
El congresista Eduardo Salhuana fue electo como el nuevo presidente del Congreso de la República, seguido de Patricia Juárez, de Fuerza Popular, en la primera vicepresidencia; Waldemar Cerrón, de Perú Libre, en la segunda vicepresidencia, y Alejandro Cavero, de Avanza País, en la tercera vicepresidencia.
