¿En qué situación está el Gasoducto Sur Peruano?

El proyecto Gasoducto Sur nació para poder llevar el gas natural de Camisea y alrededores, en la selva del Cusco, al resto del país. El GLP sale por pisco y el GNV sale por Lurín, ambos vienen de esta zona de la sierra.

Cuando el proyecto Kuntur fracasó, durante el gobierno de Ollanta Humala se hizo la primera licitación en 2013. Tanto en Mollendo como en Ilo hay dos centrales termoeléctricas, el llamado nodo energético, diseñados para consumir Disel o gas natural y generar electricidad.

Ahora, por el escándalo Lava Jato, el proyecto está paralizado desde enero de 2017 cuando fue cancelado.

Proinversión determinó que la nueva licitación sería la misma ruta primigenia que comienza en la planta separadora Malvinas, en Cusco.

A licitación se prevé convocar 1100 kilómetros de tubería que atraviesan Cusco, Apurímac, Arequipa y Moquegua, sin contar los ductos secundarios.

Por ahora ni una sola molécula de gas llega al Cusco, donde nace el recurso.

Una vez que pasa por Ilo llega a las centrales térmicas y a los hogares, vehículos e industrias. Entre el 45 % y el 50 % de la energía del Perú se genera por gas natural.

Se necesitan para esta demanda los ductos de 32 pulgadas de diámetro para el gas y otros de 24 pulgadas para líquidos de gas natural. Un 60 % de la tubería ya está sobre el terreno.

El Ejecutivo ha ofrecido licitar nuevamente el proyecto de este año, pero se está esperando el informe de una consultora británica que estará listo en marzo, la hora de la verdad para este proyecto.

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