Pobladores de Lima han construido sus casas en zonas de alto riesgo sísmico

Ante un sismo, zonas no habitables parecen convertirse en la tierra del olvido para los municipios: los moradores del Callejón del Buque, Lomo de Corbina y el Socavón 9 de Octubre de El Agustino aseguran no saber qué hacer en caso de un sismo.

[LEE: ¿En el Perú estamos organizados ante un terremoto como el de Chile?]

Las paredes precarias del Callejón del Buque, las resquebradas casas del Socavón del Agustino y  los movedizos pisos de Lomo de Corvina  no podrán resistir un nuevo  terremoto, sin embargo, a pesar de que los pobladores saben que son zonas no habitables, prefieren poner en riesgo su vida a cambio de un techo temporal bajo el cual dormir.

Entre las zonas más vulnerables en Lima ante la amenaza de un movimiento telúrico están los distritos de Chorrillos, San Juan de Lurigancho, Comas, Villa El Salvador, y Ventanilla en el Callao. Si a esto se suma otros puntos inhabitables en la capital, todos se convierten inminentemente en trampas mortales.

Esta situación se debe a varias causas: irresponsabilidad de los pobladores, problema social de reubicación, débil gestíón de crisis, falta de información de las entidades correspondientes y poca participación municipal, entre otras.