Penal de Lurigancho: administración pasó al INPE luego de más de 30 años

El penal de Lurigancho, uno de los más hacinados del país, pasó nuevamente a ser administrado por el Instituto Nacional Penitenciario (INPE), luego de 30 años. En esas tres décadas su vigilancia y administración estuvo a cargo de la Policía Nacional.

La última vez que el INPE estuvo a cargo del recinto penitenciario fue el 10 de febrero de 1987. Ese día la Policía tomó la responsabilidad de conducir este recinto de manera temporal; sin embargo, esta medida se prolongó por 30 años y 4 meses.

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Ayer agentes penitenciarios comenzaron a relevar a la policía en las labores de vigilancia y administración del penal de Lurigancho, el cual cuenta con una población de 9 067 reclusos. Lo increíble es que su capacidad es solo para 3 204 internos.

El ministro del Interior, Carlos Basombrío, afirmó que “era el momento de que la Policía deje de hacer algo para lo cual ya no está siendo instruida”. Mientras, la ministra de Defensa, Marisol Pérez Tello, recordó que ahora el INPE emprenderá la resocialización de los presos.

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El último equipo de Policías que estuvo en el penal de Lurigancho entregó, de forma simbólica, las llaves del centro penitenciario a un grupo de trabajadores del INPE.