Hoy:

    Los vínculos entre el empresario Salvador Ricci y el presidente del Poder Judicial

    Según testimonios de extrabajadores, Renzo Lecaros, hijo de José Luis Lecaros, laboró algunos años en el María Angola

    José Luis Lecaros. Foto: Cuarto Poder

    Un grupo de extrabajadores del hotel María Angola, propiedad del empresario Salvador Ricci, aseguró que Renzo Lecaros, hijo del actual titular del Poder Judicial, José Luis Lecaros, trabajó en la empresa.

    "Yo lo he conocido laboralmente. No intercambiamos muchas cosas pero sé que sí ha estado ahí algunos años", dijo a Cuarto Poder Humberto Gavino Baca Valdivia, exjefe del Centro de Convenciones María Angola.

    Por su parte, Marco Antonio Vértiz, extrabajador de seguridad y eventos confirmó que Renzo Lecaros era parte de la empresa de Ricci.

    La Fiscalía investiga al empresario por sus presuntos vínculos con los jueces del caso Cuellos blancos del puerto, como César Hinostroza, Walter Ríos, entre otros a quienes les abría las puertas del hotel y centro de convenciones para agasajos y shows.

    Estas atenciones habrían sido a cambio de que la corte de Justicia del Callao le permitiera continuar operando el negocio hotelero y mantener a raya a quienes le disputaban el manejo.

    La amistad de Ricci con el presidente del Poder Judicial, José Luis Lecaros, es conocida. Según se ha conocido, su hijo hizo prácticas en este centro hotelero, por el año 2006, 2007, aproximadamente, en el área de recepción.

    El propio titular del PJ, a través de la oficina de comunicaciones de la institución y también Salvador Ricci han admitido estas afirmaciones. Este último dijo que fue practicante por 11 meses y que recién al tercer mes de su ingreso conoció a su papá.

    Cuarto Poder intentó conversar con el titular del PJ pero no aceptó la entrevista. 

    Pero los extrabajadores también han señalado una supuesta entrega de dádivas, canastas y premios a jueces como Hinostroza, Walter Ríos y el propio José Luis Lecaros.

    "Canastas navideñas por ejemplo, que costaban por lo menos 550 a 600 soles, o les mandaba sus mejores tragos, los que ellos pedían", señaló el extrabajador de seguridad Marco Antonio Vértiz.

    Los extrabajadores continúan con el pedido del pago de la AFP de sus años laborados, dinero que, aseguran, no fue depositado a las aseguradoras y del que ahora, en contexto difícil de pandemia, no pueden tener a disposición. Las investigaciones sobre este caso continúan.

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