Guillermo Bermejo: Los testimonios de colaboradores eficaces que lo involucran con dinero ilegal
El distrito piurano de La Unión esconde una historia que involucra al congresista Guillermo Bermejo en la presunta entrega de una coima en el caso ‘Los Operadores de la Reconstrucción’
Video: Cuarto Poder
Esta zona es conocida como el corazón del bajo Piura. Fue en La Unión donde, paradójicamente, la historia de una gran amistad entre tres hombres se rompió.
Una amistad que tiene como principal protagonista al congresista Guillermo Bermejo Rojas. Sobre él cae una grave acusación que involucra la entrega de 100 mil soles de parte de un empresario y la recepción de 40 mil soles a cambio de “agilizar” cuatro obras en el necesitado y olvidado distrito de La Unión, en Piura.
Pero la historia de esta amistad quebrada empieza en el lugar donde hoy Guillermo Bermejo tiene un espacio ganado, el Congreso de la República.
Corría el año 2006 y está agresiva mujer ingresó al hemiciclo del Parlamento. Era la dirigente cocalera Elsa Malpartida.
Malpartida era en ese momento parlamentaria andina electa, ingresó al congreso a punta de golpe y vociferando en contra del tratado de libre comercio con Estados Unidos que en ese momento se debatía.
Cuando Malpartida asumió su cargo, como todo político, necesitó asesores alineados a sus intereses e ideas. Uno de esos hombres de confianza fue Guillermo Bermejo.
Por esas fechas Bermejo era un joven de 31 años conocido en los espacios "subterráneos" del debate político en el Centro de Lima o en las universidades estatales. Aquí lo vemos organizando protestas en contra del TLC con Estados Unidos junto al colectivo de izquierda “Todas las voces” que fundó en el año 2004.
En el 2007 dio un salto a la fama cuándo la policía ingresó a su casa para detenerlo. Acusaron a él y a su colectivo de planear un atentado contra el entonces presidente Alan García.
Es durante el segundo gobierno de García que Bermejo llega a las oficinas del Parlamento Andino para ser asesor de Elsa Malpartida. Ahí conoció a Jaime Jara Aguirre, un hombre 10 años mayor que él, de baja estatura, pero siempre avispado. Tenían la misma visión política y varios conocidos en común. Fue una amistad a primera vista, que duró cerca de 14 años,
Aquí los vemos juntos en un video del 2021 cuando Bermejo ya era congresista y hacía gestiones para ingresar a Palacio de Gobierno, siempre resguardado por el leal Jaime Jara.
Cuando Bermejo conoció a Jaime Jara, este último era un hombre de suma confianza de la parlamentaria andina Elsa Malpartida y siempre la acompañaba a las reuniones con otros dirigentes cocaleros que también eran conocidos de Bermejo. En una de esas actividades conocen a un joven dirigente huanuqueño de 18 años llamado Yul Valdivia Beteta, quien se unió a la amistad que Guillermo Bermejo y Jaime Jara ya habían construido.
Todos estos detalles se conocen gracias a la declaración de un colaborador eficaz, que además ha asegurado ante la justicia que tiene conocimiento que justamente los tres amigos, Yul Valdivia, Guillermo Bermejo y Jaime Jara estuvieron detrás de un pedido de dinero ilegal. Ronal Atencio, abogado del parlamentario, confirma la amistad de Bermejo con Jara, pero dice que no es verdad que Yul Valdivia conozca al parlamentario desde el 2008.
La versión del colaborador eficaz es otra. Cuenta que Valdivia ya conocía a Bermejo y le escribió, a través de Facebook, luego de la primera vuelta de las elecciones del 2021.
Acordaron verse en una cafetería de Surquillo. Era fines de abril del 2021, Bermejo llegó junto a su viejo amigo Jaime Jara. Los tres se veían luego de mucho tiempo. Yul Valdivia felicitó a Bermejo por la elección y se puso a disposición para apoyar en la segunda vuelta electoral. Cuenta el colaborador eficaz que en dicha reunión Jaime Jara, delante del electo congresista, le pidió a Yul Valdivia que los apoyara con un carro para movilizarse.
Valdivia dijo que podía hacerlo y consiguió esta moderna camioneta blanca marca Ford modelo Ecosport que Guillermo Bermejo usó, entre la primera y segunda vuelta electoral del año 2021, como demuestran estas fotografías del diario Perú21.
Yul Valdia consiguió la camioneta blanca porque su exjefe, un empresario constructor, llamado Elmer Macha fue quien se la dio. Cuando Bermejo fue captado por la prensa en mayo del 2021, Jaime Jara le pide a Yul Valdivia cambiar de carro.
Según las declaraciones, Yul Valdivia recurre otra vez a su exjefe Elmer Macha. Quien, entre julio y agosto del 2021, le entrega a Valdivia, en el estacionamiento del Centro Comercial Jockey Plaza, una camioneta roja marca Ford modelo Ranger de placa F9J887. La misma camioneta que Guillermo Bermejo ha usado innumerables veces en el 2021, sin embargo, una vez más su abogado asegura que el congresista no sabía ni cómo llegó, ni de quién era el carro.
Pero quien manejaba el carro rojo no era ningún taxista, según el colaborador eficaz era Jaime Jara que para esas fechas ya había sido contratado como trabajador del despacho de su amigo el congresista Bermejo. La defensa de Bermejo lo califica como un “administrativo” que a veces “jalaba” al parlamentario al Congreso.
Sin embargo, un pequeño detalle, es que Jara vivía en San Juan de Lurigancho y Guillermo Bermejo en Surco. Jalarlo no era precisamente un favor, parece más bien el trabajo de un hombre de confianza, un calificativo que el abogado de Bermejo prefiere evitar.
Un dato relevante del testimonio brindado en la fiscalía por el colaborador eficaz es el interés de Elmer Macha, el empresario que consiguió las camionetas que usó Bermejo. Según su declaración, entregó en el estacionamiento de una cafetería en La Molina una alta suma de dinero después que el gobierno aprobara el decreto supremo 102-2021para financiar diferentes obras en cientos de municipios del Perú.
Luego de ese hecho, según el testimonio, Yul Valdivia se dirige cerca de las inmediaciones del Ministerio de Transporte para encontrarse con Jaime Jara, quien llegó en la camioneta roja Ford Ranger.
Pero esa entrega de dinero no es la única que involucra a los tres amigos. El colaborador eficaz ha narrado que detrás de las cuatro obras de La Unión, también hubo dinero ilegal.
Según su declaración, en enero del 2022, Yul Valdivia se encontró cerca del Ministerio de Economía con Ronal Ramírez Guerra, un viejo amigo que se dedica, desde hace muchos años, a elaborar expedientes técnicos de obras para diferentes municipalidades del país. Intercambiaron números, dejando abierta la posibilidad de hacer negocios juntos.
Cinco meses después, en junio de 2022 las buenas nuevas llegaron. Primero, fue la boda del congresista Guillermo Bermejo. Una ceremonia, como ha dicho el propio parlamentario, íntima y pequeña, donde invitaron solo a los buenos amigos.
Yul Valdivia asistió al matrimonio y se tomó, para el recuerdo, esta foto con el novio. Según la defensa de Bermejo, Valdivia no fue invitado, lo llevó Jaime Jara porque no tenía con quien ir.
La segunda buena nueva, llegó también en junio, cuando Jaime Jara le envió a Yul Valdivia, vía WhatsApp, una lista de obras para Gobiernos Municipales del norte del país que estaban a la espera de aprobación en las oficinas de la Autoridad para la Reconstrucción con Cambios. Varias de esas obras pendientes estaban ubicadas en La Unión.
Es entonces cuando Yul Valdivia recuerda a su amigo Ronald Ramírez , con quien se había encontrado meses atrás cerca al Ministerio de Economía. Le cuenta la oportunidad de negocios y a los pocos días Ramírez le presenta a Fernando Ipanaqué, alcalde de La Unión.
Según el colaborador, el 15 de julio del 2022, Yul Valdivia organiza una reunión en un restaurante en el Centro de Lima donde le explica al alcalde Ipanaqué que él y sus amigos podía ayudarlo en sacar adelante los proyectos que estaban atorados en Reconstrucción con Cambios y que se podrían hacer gracias a las gestiones políticas de Guillermo Bermejo pero que eso tendría un precio el 2% del costo directo de cada obra.
Cuenta el colaborador que el alcalde Ipanaqué aceptó. Y ese mismo día Yul Valdivia llamó a su amigo Jaime Jara quien se reunió en la oficina del congresista Guillermo Bermejo, ubicada frente al Ministerio de Economía. Cerraron los detalles del trato y empezaron las coordinaciones.
Al mes siguiente de esa reunión, el 4 de agosto del 2022 el Gobierno de Pedro Castillo aprobó un decreto donde se autorizaba la transferencia de dinero a muchos municipios del país, uno de ellos fue La Unión en Piura.
El decreto transfirió cerca de 15 millones de soles para 12 obras en el distrito de la Unión. Cuatro de esas obras eran para estos colegios de los barrios más pobres. Para construir estos colegios se asignaron cerca de 7 millones de soles. El 2% de ese monto era 140 mil soles que debía ser entregado a los amigos que ayudaron en la gestión. Pero no todo estaba saliendo bien.
El colaborador cuenta que el alcalde Ipanaqué se quejó porque funcionarios de Reconstrucción con Cambios también le habían pedido sobornos y que prefería hablar con quién él identificaba, como jefe de Yul Valdivia, es decir el congresista Guillermo Bermejo.
Entonces, los amigos: Yul Valdivia y Jaime Jara hacen que el alcalde suba al despacho del congresista Guillermo Bermejo, quien no estaba en su oficina. Según el testimonio, Jaime Jara llamó al parlamentario.
El abogado del congresista Bermejo, asegura que dicha llamada no existió.
Lo que cuenta el colaborador eficaz es diferente. Habla de una estrecha amistad entre Bermejo, Jara y Valdivia. Este último por esos días empezó a presionar al alcalde Ipanaqué para que haga el pago de los 140 soles. Pero la autoridad piurana le dijo que solo tenía 40 mil. Monto que entrega a Yul Valdivia en un restaurante cerca a las oficinas de Reconstrucción con Cambios.
El colaborador eficaz cuenta que Yul Valdivia fue a la casa del congresista Bermejo, le entregó el sobre manila, pero el parlamentario, fastidiado le dio una indicación.
Según el testimonio del colaborador eficaz luego de esa reunión en surco, Yul Valdivia se va hasta San Juan de Lurigancho a la casa de Jaime Jara y le entrega los 40 mil soles.
Pero aún faltaban 100 mil soles. Es por esa razón que empezaron varias presiones sobre el alcalde Ipanaqué para completar el pago. En ese contexto se graba un audio donde se escucha a Ipanaqué y a otras personas relacionadas con el cobro ilegal. Ese hecho empieza a detonar la unidad de los tres amigos.
No pasó mucho tiempo y, en noviembre del 2022, el audio se difundió en redes sociales. Al instante, en la Plaza San Martín, se reúnen Yul Valdivia y Jaime Jara, este último le hace saber la molestia del amigo en común que, en ese momento, empezaron a perder.
La primera semana de diciembre del 2022, Jaime Jara le dio 7 mil soles a Yul Valdivia. Le dijo que ese dinero era por la gestión que hizo para las obras en La Unión.
Luego de esa entrega Yul Valdivia llamó poco a Jaime Jara, pero en julio de este año le pidió un favor: que el congresista Guillermo Bermejo asistiera al aniversario de un centro poblado en Huánuco. Bermejo aceptó, Jaime Jara no viajó, pero Yul Valdivia estaba ahí. Se tomó una foto con el parlamentario, junto a otros invitados. Fue la última vez que se vieron las caras.
Casi tres semanas después de tomarse esta foto, capturaron a Yul Valdivia y Jaime Jara. Se les acusa de ser parte de una organización criminal por las presuntas coimas que recibieron. Jara está detenido mientras que Valdivia ha colaborado con la justicia y afronta el proceso en libertad. Guillermo Bermejo está investigado en la Fiscalía Suprema, pero su condición de congresista lo ha salvado por ahora de cualquier detención.
Mientras en el lejano distrito de La Unión las obras permanecen detenidas y parece quedarán en el olvido, la situación de Bermejo dependerá de la calidad de información que aporten los colaboradores eficaces y de la lealtad de esas viejas amistades que, de momento, parece estar rota.
