Gremios empresariales rechazan nombramientos en Petroperú
Cuestionan que ambos nombramientos respondan más a criterios políticos que técnicos, lo que, según ellos, pone en riesgo la estabilidad y eficiencia de la empresa estatal
El comunicado de los gremios empresariales refleja un fuerte rechazo y preocupación por los recientes nombramientos en Petroperú, específicamente por la designación de Alejandro Narváez como presidente del directorio y de Óscar Vera como gerente general.
Mediante un comunicado, los gremios cuestionan que ambos nombramientos respondan más a criterios políticos que técnicos, lo que, según ellos, pone en riesgo la estabilidad y eficiencia de la empresa estatal.
A pesar de que Petroperú ha necesitado inyecciones millonarias del Estado para evitar su insolvencia, Narváez ha minimizado la crisis financiera de la empresa, lo que ha generado alarma entre los sectores empresariales.
La situación se ha visto exacerbada por las renuncias de dos directores recién nombrados, lo que aumenta la incertidumbre sobre la gobernanza de la empresa.
Critican estrategia en Petroperú
Los gremios también critican la falta de una estrategia profesional e independiente para manejar los problemas financieros y operativos de Petroperú, lo que podría poner en riesgo los recursos públicos y la confianza de los mercados.
Aseguran que el Ejecutivo está inclinándose hacia una gestión politizada en lugar de apostar por una reestructuración que involucre a administradores con experiencia y reglas claras de gobernanza.
El impacto de estas decisiones también podría afectar la capacidad de Petroperú para cerrar las brechas en sectores prioritarios, como la infraestructura y la atención sanitaria, mientras la empresa reporta pérdidas millonarias, lo que refuerza la percepción de ineficiencia.
Hacen un llamado a Dina Boluarte
Por lo tanto, los gremios hacen un llamado a la presidenta Dina Boluarte para reconsiderar ambos nombramientos y adoptar un enfoque más técnico y profesional en la gestión de Petroperú.
Esto con el fin de restaurar la confianza en la administración pública y evitar que el manejo de la empresa siga afectando negativamente a los ciudadanos y a la economía en general.