Las contradicciones de los padres del bebé asesinado en Iquitos

El país entero quedó horrorizado cuando se informó que, en Iquitos, un bebé de once meses de nacido fue asesinado a puñaladas por delincuentes que intentaron robarles a sus padres, pero hoy, este extraño y horrendo crimen podría tomar un nuevo rumbo en manos de la policía y la fiscalía loretana.

Este es el último video del pequeño Stéfano en brazos de su madre. Ni siquiera pudo cumplir un año cuando falleció por la gravedad de sus heridas al ingresar con un traumatismo abdominal abierto en el hospital de Iquitos. 

Cinco días después y luego de una terrible agonía el bebé falleció sin poder ser trasladado a Lima para ser atendido. Pero qué pasó aquel día en la oscuridad y a mitad del turístico, pero hoy, también peligroso, puente nanay azotado por la delincuencia. Vanesa Cachique, madre de Stéfano, sacó desde lo más profundo de su ser lo que tenía guardado hasta este momento.

Aquella tarde, Vanesa, además de sospechar y vincular al padre de su hijo en el horrendo crimen, narró otros hechos hasta ahora desconocidos, uno de los que más intriga a la policía, es que, el asesinato de su bebé no ocurrió en un asalto como se ha venido contando hasta el momento.

Una confesión que para la Policía abre nuevos hilos conductores en la investigación. Al notar que ninguno de los dos quería declarar ante la policía cuando recién ocurrieron los hechos, aduciendo que se encontraban en el peor momento de sus vidas. 

Algo llamó la atención de la policía y la fiscalía que generó que se lleve a cabo la diligencia de reconstrucción del crimen. Fue el testimonio clave del cuidador de la entrada al puente nanay en las noches. 

En una caseta, comenzando el puente, según los agentes, una persona vio entrar a la moto de ambos padres con el bebé, sin embargo, asegura también que no vio entrar a nadie más después, por lo que la versión de que habrían sido dos atacantes en una moto lineal los que asesinaron al pequeño Stéfano, estaría siendo evaluada y habría perdido peso.   

Entonces la fiscalía junto a los agentes de inteligencia de Iquitos, decidieron investigar el crimen a fondo y realizar una reconstrucción de los hechos pues la única víctima aquí, resultó ser el bebé de 11 meses. 

El día viernes 12 de mayo, ambos padres llegaron nuevamente al puente Nanay en la motocicleta que se trasladaron aquel día, siguieron cada una de sus huellas hasta llegar al lugar de los hechos, exactamente en el medio de la enorme construcción de dos kilómetros y medio. 

Primero, Jesús Bautista fue guiado por la policía para que brinde su testimonio en la reconstrucción del crimen. Mientras, Vanesa esperaba en un vehículo policial. Para la PNP, los detalles narrados por ambos en la reconstrucción del crimen son demasiado específicos teniendo en cuenta la, prácticamente, nula visibilidad en la zona por la falta de alumbrado. 

Por ejemplo, los detalles con los que Jesús Bautista narró cuando, según él, vio en total oscuridad mientras Vanesa era atacada con el bebé en brazos. Terminada la diligencia, Jesús Bautista solo alcanzó a decir que los nervios y el dolor que la madre de su hijo siente, le habrían jugado una mala pasada cuando deslizó la idea de que él estaría implicado en el asesinato del pequeño.

Vanesa Cachique en la entrevista que nos dio en exclusiva aseguró que el ataque no fue un asalto, pues no les robaron absolutamente nada. Cuando llegó el turno de la madre, contó por su lado también con lujo de detalles, pormenores que resultaron sospechosos y que confirmarían las contradicciones entre ellos.

Durante más de cinco horas, los agentes de la Depincri Iquitos tomaron declaraciones que enriquecieron la investigación en curso. En las próximas horas, la fiscalía de Iquitos solicitará una pericia psicológica para los padres del pequeño Stéfano. Los resultados de aquel examen serán determinantes para decidir cuál será el siguiente paso a dar en esta investigación que aún tiene demasiadas incógnitas.