Cuestionan que pareja del congresista Molina posea concesión minera de 200 hectáreas
El legislador oficialista es presidente de la Comisión de Energía y Minas, por lo que podría existir un posible conflicto de intereses
No sólo enfrenta una denuncia por tener un trabajador fantasma en el Congreso que administraba su hotel en el Cusco y que ha motivado la suspensión de sus derechos partidarios en la bancada nacionalista. Ahora sobre el congresista Agustín Molina, presidente de la Comisión de Energía y Minas del Parlamento, recae otra grave acusación, pero esta vez sobre un posible conflicto de intereses en el que habría incurrido.
Frente a la concesión minera metálica de Martha Truyenque Vásquez conviviente del congresista Agustín Molina ubicada en el distrito de Chiara en la provincia de Andahuaylas. Pero todavía no se han iniciado los trabajos de exploración en esta quebrada que tiene una extensión de 200 hectáreas.
En junio de 2012, mientras Agustín Molina Martínez integraba la comisión de Energía y Minas del Congreso como miembro titular, su conviviente, Martha Truyenque gestionaba como persona natural ante el Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico del Ministerio de Energía y Minas (INGEMMET) la adjudicación de un yacimiento minero de 200 hectáreas en la comunidad de Chiara, ubicada a cinco horas de distancia de la capital de Apurímac en Andahuaylas.
Un trámite que finalmente obtuvo luz verde el 7 de junio del 2012. La resolución que le dio la concesión a Martha Truyenque fue firmada por la ex congresista nacionalista Susana Vilca, jefa del INGEMMET.
Martha Truyenque realizó un pago para mantener la vigencia de la concesión a su nombre en INGEMMET el 5 de marzo de este año. Si bien los Molina Truyenque no han empezado los trabajos de exploración en esta zona, eso no quiere decir que hayan perdido el interés por la minería, sino simplemente podrían estar esperando el momento oportuno para emprender el nuevo negocio familiar.
Según su hoja de vida, Agustín Molina Martínez es ingeniero agrónomo de profesión. Ha trabajado en Bayern como representante de Desarrollo y hasta antes de ser electo como congresista por el Cusco tenía un negocio familiar de agroveterinaria llamado La granja Kayra. Su ingreso mensual era de cuatro mil soles, pero su vida dio un giro inesperado desde que llegó al Congreso.
Lo que sí queda claro de su trayectoria política es el denodado interés que demostró, desde el primer día que juró como congresista, por integrar la comisión de Energía y Minas del Congreso, el grupo responsable de elaborar todos los proyectos de ley relacionados a la pequeña y gran minería así como temas energéticos.
En agosto de 2011 integró de la comisión de Energía y Minas. Al año siguiente, en julio de 2012 fue miembro accesitario de esta comisión y desde agosto de 2013 la preside. Quizás la respuesta a su ambición por integrar este grupo de trabajo se encuentre en las recientes declaraciones que dio en una audiencia pública en Andahuaylas llamada: Información de la Minería Artesanal y Pequeña Minería organizada por la comisión de Energía y Minas que él encabeza. Escuchemos con atención lo que dijo hace apenas un mes, el 14 de abril último.
“Nuestro gobierno, nuestro presidente Ollanta Humala a través de la PCM ha hecho un conversatorio no con los dirigentes regionales. Significa que a partir del 20 de abril de este ano hasta el 2016 todos nosotros los mineros que no hemos podido formalizarnos hasta el 19 de abril tenemos la opción para seguir en este proceso de formalización hasta esa fecha”, dijo Molina.
Ahora se podría entender por qué eligió a los pequeños mineros de Andahuaylas, quizás con la intención de proteger sus muy cuestionable s intereses.