Contraloría: La educación estatal está jalada
EXCLUSIVO. El preocupante estado de muchos colegios estatales alrededor del país, tras análisis de la Contraloría General de la República.
Cual director de colegio, el Contralor General de la República, Nelson Shack, estudia a detalle los resultados de un examen que su equipo de trabajo acaba de hacer en más de seis mil colegios públicos en todo el Perú.
En su centro de operaciones, desde donde fiscaliza para evitar el mal uso del dinero público, Nelson Shack recibe a Cuarto Poder. Esas primeras frases en esta entrevista exclusiva preceden malas noticias, pésimas noticias:
Nelson Shack, Contralor General de la República: "El 28 % de todos los colegios que hemos visto no tienen las estaciones de lavado y desinfección de manos de ingreso. En el 15 % de colegios hay profesores que no tienen vacunación completa […] Es más, casi más del 60% de los colegios tienen problemas con los servicios higiénicos, básico, básico, básico. O sea, una cuarta parte de los colegios tiene problemas en agua y desagüe".
En costa, sierra y selva, la Contraloría ha hecho una evaluación que no tiene precedentes. Ha desplegado más de 800 auditores y más de 600 ciudadanos, monitores que inspeccionaron 6173 colegios públicos de primaria y secundaria entre el 31 de enero y 18 de febrero último.
Un esfuerzo nunca antes realizado para obtener una radiografía completa a pocos días de que el grueso de colegios públicos retornen a clases presenciales. Tan sorpresivo que 500 de los colegios visitados estaban cerrados, con llave.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "La evidencia muestra que hay un 8 % de colegios que cuando visitamos estaba cerrado porque no había directores en funciones. Unos pueden decir que 8 % no es mucho, pero no debería haber ninguno".
Pucallpa.- Justamente uno de los colegios a los que llegó la Contraloría fue el único que hay en el caserío 7 de Junio en Pucallpa. No había director, tampoco agua, ni pizarras. En el Colegio Manantay, dos pabellones son almacén de cemento de una constructora y de libros que en el 2020 y 2021 jamás se repartieron a sus escolares. La lluvia cae y las expectativas de una buena educación también.
En ese tiempo de para por la Covid-19, han pasado tres presidentes de la República, cinco ministros de Educación y dos años de colegios cerrados. ¿Qué hicieron o, mejor dicho, qué no hicieron en este tiempo?
Nelson Shack, Contralor General de la República: "Esa es la realidad en la que vamos a recibir chicos y chicas en mes de marzo que empieza la presencialidad o semi presencialidad ¿algo triste? sí muy triste en realidad. Sobre todo, por el hecho de que, ok, no dos años, siempre digo que el 2020 fue duro para todos, pero el año 2021 se debieron tomar medidas para resolver esto […] Entonces, hemos perdido inútilmente el tiempo".
Tiempo en el que la Contraloría realizó un interesante acercamiento a la educación a distancia. El año pasado, se entrevistó a más de 67 000 alumnos que tomaron clases bajo el sistema Aprendo en Casa.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "Imagina una niña que el 2019 estaba en Inicial, ahora ya está en Primaria. Entra a 3ro de Primaria. En estos dos años ¿esa niña que asistió a Aprendo en Casa, tú crees que aprendió lo necesario?".
El Contralor, economista de profesión, guarda los números en la memoria: el 44 % de los niños encuestados el año pasado sintió que no había aprendido lo suficiente. Más de la mitad ni siquiera habría pasado el año.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "En el año 2020, no más del 43 % aprobaron y sin embargo todos han pasado el año"
En todo el Perú, nuestros corresponsales han corroborado semana a semana que los colegios estatales parecen desangrarse con notas en rojo, en un crimen llamado Educación.
Lima provincias.- Sin agua, ni luz, ni cerco perimétrico, el colegio Juan de Dios Guevara, en el centro poblado Santa Rosa de Huarochirí, pretende acoger a 120 alumnos de secundaria en cuatro módulos. Previo a clases, el director se concentra en este quiosco de madera.
Jauja.- Son héroes secretos como este profesor, Urbano Torres de 60 años, del colegio 30514 de Jauja. Cayó cinco metros por intentar arreglar el techo del aula antes de reencontrarse con sus alumnos el lunes.
Se cuenta en más de seis millones los alumnos de escuelas públicas que desde este lunes y hasta el 28 de marzo, deberían volver a sus colegios con la ilusión de recuperar el tiempo perdido. ¿Cuál es el golpe emocional con el que llegan y con el que saldrán el primer día de su año escolar?
Rachel Watson, psicóloga clínica y educacional: "Es un golpe a su autoestima. Es pensar 'no soy importante, ¿qué tan importante soy si en mi escuela no hay condiciones básicas para que yo pueda estudiar?'. Un niño o niña que estudia en situaciones precarias siente que no es válido, que no es importante para la sociedad".
Niños, niñas, adolescentes que durante dos años recibieron el mensaje repetido del aseo y la lavada de manos, pero son otros los que, en este punto, se lavan las manos.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "Nos explican que los sistemas son muy antiguos, que el sistema de agua y desagüe no funciona, que no se ha hecho mantenimiento adecuado, que no se ha transferido los recursos en lo suficiente. Hay multiplicidad de razones, pero lo cierto es que no funcionan y así los niños van a ir a estudiar".
La brecha en infraestructura de los colegios supera los 100 000 millones de soles. Se cuentan en miles los colegios que tendrían que ser demolidos. Las cifras suben en pena y olvido.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "En más del 38 % de los colegios que hemos analizado a nivel nacional la planta de profesores no está completa. Imagina que el 85% de colegios no tiene psicólogos, a pesar de que todos sabemos el enorme daño que ha ocasionado en la pandemia en la salud mental, pero además de todos los problemas de bullying violencia y acoso que se presentan en colegios".
Rachel Watson, psicóloga clínica y educacional: "Vienen dos años de pandemia donde muchos han sufrido situaciones distintas en sus hogares: niños huérfanos, con pérdidas, niños que han pasado por situaciones familiares económicas complicadas".
Es una regla que, a más educación, mayor el nivel de vida, pero en Perú el piso no es parejo y se rompe a pedazos. El presidente, que es maestro, lo ha palpado.
A más de siete meses de su gobierno, muchos de los colegios no tienen agua, ni siquiera tienen un caño.
Pedro Castillo, presidente de la república: "En mi gobierno ningún niño va a quedar fuera de la matrícula. Ningún niño puede ser avasallado".
Pero si la infraestructura escolar es un problema grave, para la Contraloría la adecuación de los colegios a las normas sanitarias por la Covid 19 es todo un misterio.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "Se han gastado más de 400 millones de soles el año pasado para mantenimiento y kits de higiene y este año se ha habilitado más de 417 millones de los cuales de acuerdo al MEF ya se ha ejecutado más del 80 % ¿Pero se ve? Nosotros no vemos".
Se dice que las limitaciones de un profesor para enseñar son también las de sus alumnos para aprender.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "No debemos pensar que por que los niños no marchan, no votan, nadie les hace caso. Ellos son los que van a sufrir y van a continuar sufriendo los problemas que hay en el sistema educativo producto de las autoridades que cuando tienen que hacer las cosas no las hacen".
Se contabiliza en alrededor de 300 000 escolares los que han desertado durante la pandemia, otro tanto tuvo que migrar de colegios privados a la escuela pública, un régimen estatal que les da esta bienvenida.
Nelson Shack, Contralor General de la República: "Una gran pregunta que tenemos es ¿dónde van a estudiar esos muchachos? si es que las infraestructuras no han crecido ni mejorado. Entonces por esa razón ante tu pregunta de cuánto nota le pongo, no sé qué nota ponerle en realidad, pero claramente está jalado".
Irónicamente, el mega operativo de control que llevó a cabo la Contraloría se llamó “Buen Inicio del Año Escolar 2022”. Pero los resultados, como hemos visto, dan poco margen para el optimismo.