La conexión de la fiscal Peralta con los 'Cuellos Blancos'

Ahora que la justicia toca la puerta, Andrés Hurtado ha decidido mantener su silencio, no acogerse a la colaboración eficaz. La situación de la fiscal Elizabeth Peralta, en cambio, ha variado abruptamente. Ahora, las evidencias halladas en su oficina y en su casa le abren un nuevo frente, a raíz de dos grabaciones presuntamente cargadas de delitos, que se conectarían también con el caso ‘Cuellos Blancos de Puerto’.

Conversaciones grabadas en las que participaría la misma fiscal Peralta y un varón interlocutor, que pondrían de manifiesto el aparente apoyo en una investigación a Joaquín Ramírez, exsecretario general de Fuerza Popular, la venta de exámenes a magistrados y el presunto ascenso irregular de la fiscal Peralta, en el Consejo Nacional de la Magistratura de los ‘Cuellos Blancos’.

Prisión preventiva, en cuyo requerimiento de 183 páginas se revelan nuevos episodios aparentemente delictivos de suspendida fiscal Elizabeth Peralta.

El martes empezaron los allanamientos por el caso Chibolín, muy cerca al vencimiento de la prisión preventiva. Lo insólito y sospechoso fue que la información se filtró horas antes que se ejecutaran las diligencias, lo que provocó que la fiscalía responsabilizara al Poder Judicial. El trabajo fiscal se complicó también, por la ausencia de los abogados, pues su presencia en los allanamientos es necesaria a raíz de la nueva ley de crimen organizado.

Hubo retrasos, lo que representó una oportunidad para desaparecer pruebas. A todas estas trabas, se sumó la falta de allanamiento de una de las viviendas donde Andrés Hurtado residía antes de ser detenido. Tras estos sospechosos vaivenes llegó el pedido de prisión preventiva, la noche del último jueves.

Ahora, el caso ha escalado hasta vincularse a los Cuellos Blancos del Puerto. Según Perú 21, el USB incautado en la oficina de la fiscal Peralta durante el último allanamiento contenía un registro audiovisual que data del 2016.  Un diálogo entre quien sería la fiscal Peralta y un interlocutor, en el que ella habría hecho gala de su cercanía con los miembros del desaparecido Consejo Nacional de la Magistratura de los ‘Cuellos Blancos’.

Aparentemente, la fiscal habría tenido servido su examen de ascenso. Previamente, la fiscal apodada “madre”, también habría sostenido un desayuno con el ex consejero Iván Noguera y el congresista José Luna Gálvez. Esto le habría contado la apodada madre a su interlocutor.

Estas nuevas revelaciones se suman a las transcripciones de audio que se conocieron en los últimos días y que forman parte del requerimiento de prisión preventiva contra ‘Chibolín’ y compañía. En esta primera transcripción, el tenor es la venta de exámenes en el Consejo Nacional de la Magistratura, el CNM de los ‘Cuellos Blancos del Puerto’. La voz femenina le correspondería a la fiscal Peralta.

Para el Ministerio Público, la presunta ayuda a favor de la fiscal Peralta para ascender sería un acto de corrupción proveniente de los miembros del desaparecido CNM.

El segundo registro también involucraría a la fiscal Peralta. El tenor ahora es una supuesta ayuda en una investigación a Joaquín Ramírez, exsecretario de Fuerza Popular y actual alcalde de Cajamarca. 

Según la grabación, Peralta hablaría con la entonces fiscal Tania Liñan para que las investigaciones de Joaquín Ramírez y Keiko Fujimori no se acumulen. La “madre” le hace nuevamente esa promesa a su interlocutor.

Según la fiscalía, esto demostraría la capacidad para delinquir de la fiscal Peralta. El día del allanamiento del martes pasado, en polo y buzo como muestran estas fotografías, la suspendida magistrada tenía preparadas unas maletas con ropa lista, porque creía que la detendrían. En su misma casa, se encontró este manuscrito en con tres frases sugerentes para cualquier fiscal:

-Borrar el Backup del Whastapp.

-Borrar configuración de obtener historial.

-Borrar historial de Google Maps, mis rutas.

La apodada madre y Andrés Hurtado regresan a audiencia de prisión preventiva mañana lunes. Cualquiera que sea la decisión del juez, el ‘caso Chibolín’ todavía continuará.