Caso Gabriela Sevilla: Detalles del testimonio que dio su pareja ante la Policía
Ramiro Gálvez Ramírez contó a la Policía que el supuesto parto de Gabriela estaba programado para el 28 de agosto de este año
Ramiro Gálvez Ramírez, conviviente de Gabriela Sevilla, rindió su manifestación ante la Policía Nacional del Perú y la Fiscalía informando que tenía serias dudas sobre el embarazo de su pareja, quien movilizó a todo un país tras ser reportada como desaparecida el pasado 20 de octubre y aparecer dos días después sin su bebé.
En las declaraciones, Ramiro Gálvez reveló que Gabriela le enseñó un informe de su embarazo emitido por un doctor que incluía su número de colegiatura, con quien más adelante conversaría solo para confirmar que el documento era falso, pues los número de colegiatura no coincidían.
“Ella se encontraba en su último estado de gestación, siendo que se controlaba en la Clínica Internacional de San Borja, pero ella nunca me mostró la historia clínica o algún documento de su estado de gestación real, lo único que me mostró en una oportunidad fue un informe emitido por el doctor, en donde indicaba que la fecha prevista de parto era el 28 de agosto de 2022, así como un par de fotos de una ecografía”, dijo Ramiro.
Gálvez relata que precisamente es de ese informe que nace la duda de su paternidad y también del embarazo, debido a que las fechas de programación del nacimiento no coincidían. Razón por la que “hace 4 días atrás de su desaparición decidió buscar la ayuda de cinco ginecólogos, para ver el tiempo de gestación real que tenía mi conviviente y, además, si coincidía con la fecha y el tiempo que debería nacer mi hijo”.
“Dentro de los cinco ginecólogos con los que hago las consultas del embarazo de mi conveniente, me acerco con el doctor, quien supuestamente le había dado un informe de embarazo a mi conviviente, pero era falso, mostrándome su colegiatura que era muy distinta a la que mi conveniente me había mostrado”, agregó Ramiro a las autoridades. Al hacer su propia investigación, él encontró que el número de colegiatura que había sellado el informe falso correspondía a una doctora mujer.