Capturan a feminicida que cambió su apariencia para evitar a la justicia
El extranjero le disparó a una madre de familia que se negó a retomar la relación sentimental hace seis meses
Amante de los selfies, de sonrisa coqueta así era Katerin Vivas Perez, una extranjera de 23 años que llegó al Perú en el 2022 para conseguir un mejor futuro para ella y sus tres hijos, pero se enamoró de un hombre que meses después acabó con su vida.
Pero ella decidió decir basta y terminó con aquel hombre que, sumido en el despecho y sed de venganza, armó un espeluznante plan. Llegó a su casa y sin remordimiento le disparó en la cabeza.
La víctima se había instalado en Vitarte y empezó a trabajar como azafata en una discoteca del distrito. Sus amigos señalan que extrañaba a sus otros dos hijos que había dejado en Venezuela al cuidado de su familia. Por ello tenía previsto regresar en diciembre de este año para estar con ellos.
Pero, aquí se encontró con Yohann López Sequera de 26 años, un venezolano que se convirtió en su pareja. Los que la conocen señalan que ambos iniciaron una relación en Venezuela cuando Katerin tenía solo 15 años, pero su madre los separó al ver que él tenía una vida dedicada al vicio.
Años después se reencontraron en el Perú y decidieron convivir en una vivienda de Ate. En algunas fotografías subidas a las redes sociales se leía siempre abrazados, demostrando el inmenso amor que decían sentir.
Al parecer no todo era color de rosa, sus amigas señalan que Yohan era celoso, posesivo, no la dejaba salir y la obligó a renunciar a su empleo de azafata. Por ello Katerin buscó otro trabajo en un centro comercial.
Señalan que este sujeto la golpeaba, pero Katerin estaba cegada por aquel amor enfermizo y nunca lo denunció. Hasta que un día descubrió en el celular de Yohan mensajes comprometedores que develaba que él le era infiel.
Tras esto, ella lo expulsó de la casa, pero este hombre la seguía acosando, al parecer no soportaba el rechazo y habría planeado una fatal venganza. El 4 de diciembre del año pasado la llamó por WhatsApp a la 1:08 de la tarde, pero Katerin no le respondió porque quería enterrar ese terrible capitulo que vivió al lado de aquel hombre toxico, le escribió a la 1:17 de la tarde amenazándola de muerte.
Ella asustada, presentía tal vez que algo podía sucederle, por ello le reenvió ese mensaje a una de sus amigas, pero antes del crimen, Johan pidió a la hija de Katerin y otra menor que estaba con ella en el cuarto ir al parque.
Al quedar completamente solos sacó su arma y sin piedad le disparó en la cabeza a la mujer que decía amar, para luego huir del lugar. Al saber que la policía lo buscaba intensamente cambió su color de cabello para evitar ser reconocido, así se le veía con el cabello amarillo, pero la División de Homicidios de la Dirincri, estaba tras sus pasos y seis meses después lo capturó en la plaza Manco Cápac.
Este sujeto tenía antecedentes policiales en su país. En el 2014 y el 2015 fue detenido en Venezuela por detención y ocultación de arma de fuego. Habría empezado en la vida criminal cuando tenía solo 17 años. En el 2015, una orden de captura pesaba sobre él tras estar preso por el delito de robo. Luego de cinco años salió en libertad y viajo al Perú.
Según la policía, este sujeto confesó que tenía un arma de fuego en Venezuela, ya que junto a integrantes de su banda criminal se dedicaban al raqueteo y al robo de celulares, actividad que seguía desempeñando en suelo peruano.
Otra de las versiones que dio ante la policía es que Katerin tenía un arma de fuego y que ella intento atacarlo y que en el forcejeo se disparó. Coartadas que los agentes lograron desvirtuar por una serie de pruebas halladas. Yohann López Sequera, alias Negro Johan, fue acusado por el delito de feminicidio, a quien le justicia le dio 9 meses de prisión preventiva.