Amazonas: denuncian que instalaron viviendas prefabricadas para damnificados en zona peligrosa
La inversión pública de medio millón de soles se hace agua frente a las necesidades de una población en extrema pobreza cuyos reclamos no tienen el suficiente eco para poder ser atendidos.
Región Amazonas, provincia de Uctubamba, distrito de Cajaruro. Aquí en la localidad de La Florida, una de las zonas más pobres del norte del Perú hay un elefante blanco, una comunidad fantasma conformada por módulos de viviendas prefabricados que se van hundiendo lentamente en un terreno peligroso e inhabitable.
Hace un año, las humildes casas de estos pobladores fueron arrasadas por el deslizamiento de tierra que provocaron las lluvias torrenciales. Se declaró la zona en emergencia y entonces el Ministerio de Vivienda les entregó a los damnificados 25 módulos valorizados en 500 mil soles para que así pudieran tener un techo digno.
Sin embargo, estas casas temporales increíblemente nunca fueron habitadas porque se instalaron en una zona rodeada de quebradas, piso inestable y arcilloso.
La inversión pública de medio millón de soles se hace agua frente a las necesidades de una población en extrema pobreza cuyos reclamos no tienen el suficiente eco para poder ser atendidos.
En agosto del año pasado, en una ceremonia, no faltó el confeti y la foto oficial, las autoridades entregaron los módulos de vivienda. Se suponía que las familias damnificadas por el azote de la naturaleza iban a vivir mejor en vez de estar bajo el toldo de una carpa.
Fue la municipalidad de Cajaruro, en la región de Amazonas, la autoridad que recomendó al Ministerio de Vivienda la instalación de las casas prefabricadas en un terreno que hoy está lleno de grietas y otras erosiones.
Solo basta escarbar la tierra arcillosa y húmeda en el lugar para comprobar el deterioro de un bien público que debería servirle a los más necesitados. Así lo corroboró la congresista Mery Infantes, representante de Amazonas por Fuerza Popular, en una de sus visitas de representación.
Las plataformas levantadas por proveedores del Ministerio de Vivienda tienen como soporte cubos de concreto que se están desmoronando. Los pedestales han quedado expuestos y sin suelo fijo de apoyo.
“Es indignante, pero lo peor de todo es que tu mandas documentos, informes a la municipalidad, al gobierno regional, a los ministerios y no hay respuesta. Eso para mí ha sido lo más frustrante”, dijo la parlamentaria.
Pese a sus escasos recursos económicos, los pobladores denuncian que cada familia pagó mil soles para acceder a este terreno de propiedad privada. Ahora, en medio de un elefante blanco carcomido por las lluvias, se sienten engañados. En este lugar no hay luz, agua ni desagüe.
Quién es el responsable de que estos módulos de viviendas temporal de medio millón de soles se echen a perder sin sanción alguna. El Ministerio de Vivienda apuntó hacia el alcalde del distrito de Cajaruro, Hildebrando Tineo.
“La percepción de nosotros es que el alcalde tiene que terminar de hacer su chamba. No tenemos por qué liberar al alcalde de su obligación y de su responsabilidad para con la gente”, manifestó Rodolfo Santa María, viceministro de Vivienda y Urbanismo.
Por su parte, el alcalde de Cajaruro se defiende: “El gobierno regional es el que emite la evaluación de riesgos. Nosotros no lo hemos emitidos, nosotros solicitamos la evaluación de riesgos del terreno que nosotros, conjuntamente con la población, se propuso en una mesa de trabajo”.
Funcionarios del gobierno de Amazonas explicaron a Cuarto Poder que no son responsable del deterioro de un terreno, el cual para ellos es de uso temporal.
Debido al terremoto de magnitud 7.5 que sacudió la región de Amazonas en noviembre pasado, el Ministerio de Vivienda se quedó sin módulos prefabricados en los almacenes porque tuvo que atender a más de cinco mil damnificados, pero ironías de la gestión pública, en Cajaruro, en La Florida, las casas temporales se deterioran y solo sirven para graficar la postal de un indignante abandono.