Objetos que puedes encontrar en tu oído y provocan infección

Muchas personas hacen sus propios hisopos con palitos de fósforo, lo que no saben es que por hacer esto, muchas veces se quedan restos o pedazos de algodón.  Este hábito no se debe hacer porque puede provocar una infección.

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Otro mal hábito es rascarse el oído con un lápiz o llaves para limpiarse.  Esto no se hace porque se raspa el conducto auditivo, se crea una herida, esta se lesiona y desencadena en una infección.

Canicas: Los niños se meten canicas en el oído y es muy difícil de extraerlas.

Frejolitos, lentejas o garbanzos: Aunque usted no lo crea, muchas veces se han encontrado frejolitos en el oído que germina y alguna vez se ha extraído un arbolito.

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Insectos: Provoca una sensación espantosa.  Cuando un insecto vivo se meta en el oído se recomienda echar dos gotitas de glicerina en el oído, esto matará al animalito y sentirá alivio.

Finalmente, no se deben usar los hisopos.  Recuerde, que mientras más te saques el cerumen, más cerumen produces.