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Agresiones físicas por celos e infidelidad generaron la decisión de la separación
Perú.
Christian Solís y Gustavo Sierra se casaron hace un año y un mes en Buenos Aires, la capital argentina, en una ceremonia que fue considerada la primera boda aceptada legalmente entre dos peruanos en ese país.
Pero un año después los corresponsales en Huancayo, ciudad donde ambos habían elegido vivir, registraron las escenas de una relación en crisis, y lo peor sin un marco legal que vele por los intereses de ambos.
Cristian asegura que su aun esposo le causo importantes lesiones. Y que las peleas habrian surgido por celos e infidelidad. Pero otro problema muy difícil de resolver es la repartición de bienes que ambos han podido acumular en su corto periodo de coexistencia. Cristian asegura que invirtió algunos miles de soles en el negocio que en un principio ambos administraban en una calle de Huancayo.