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Desde la espesura del VRAEM, la operación militar que sacó a 39 personas de
una esclavitud de 25 años. Hombres, mujeres pero sobre todo, 26 niños nacidos
como parte de las masas cautivas de Sendero Luminoso. Peruanos aislados,
dueños solo de su propio miedo, que empiezan una nueva e incierta etapa.
Ha estado secuestrada 23 años, ella y todos aquí eran hasta este lunes esclavos en pleno siglo XXI. Sendero Luminoso les robó sus vidas y las fuerzas del orden se las devolvieron formalmente esta semana, pero el abismo no se salta rápido.
El estado los ignoró antes de que SL los drogara de miedo y los tratara como a hormigas obreras y reproductoras. Desde esta semana ellos son ciudadanos por primera vez y algunos tienen 50 años.
El lunes fueron liberados en la espesura de la selva. Fue una operación de la brigada especial de inteligencia, conformada por personal seleccionado de la Policía y de las fuerzas armadas que por primera vez trabajan de forma conjunta.
La brigada fue creada por orden del presidente Ollanta Humala y está dirigida desde su nacimiento en el 2012, por el viceministro Iván vega. Sobran las palabras. Tan solo en este vuelo 39 personas recuperaron su libertad.
La operación comenzó el 23 de julio, con desplazamiento en helicóptero de efectivos desde la base policial de Mazamari centro de operaciones del Vraem, luego de varios días de caminata, lograron llegar al campamento.
Esta vez las personas no huyeron al ver uniformados como siempre sucedía y es que detrás hubo un trabajo de inteligencia que comenzó el año pasado.
Algunos de los liberados anteriormente en este sector se convirtieron en colaboradores de las fuerzas del orden y volvieron al lugar para convencer a los aún cautivos de que el Ejército y la Policía no los matarían.