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Indicios de utilización política y extrañas asesorías incluso del hermano de la alcaldesa SusanaVillarán, alrededor de esta importante masa de comerciantes en pos de un lugar en el mayor centro de abastos de la ciudad.
Comerciantes de La Parada, dispuestos a conseguir un puesto nuevo en el centro deabastos mayorista de Santa Anita, no sólo le entregaron 15 mil soles en efectivo a un asesor de mercados de la empresa de mercados de la Municipalidad de Lima, sino que también buscaron la “ayudadita” de un influyente personaje para ser aparentemente favorecidos en un proceso de adjudicación.
En este reportaje Cuarto Poder les mostrará un nuevo video que tiene como principal protagonista a Álvaro Villarán de la Puente, nada menos que hermano de nuestra aún alcaldesa de Lima, Susana Villarán, quien, haciendo alarde de su aparente poder, habría presionado a Rafael Gómez, gerente de la empresa municipal de mercados, EMMSA, para que supuestamente ubicara a vendedores mayoristas de tomate de La Parada en los nuevos puestos Belmont, sin que éstos pasaran por previa evaluación.
¿Cuál sería el papel de Álvaro Villarán en la gestión de EMMSA?, ¿por qué el hermano de la alcaldesa Susana Villarán parece dictar instrucciones a un funcionario edil con tan solo hacer un click desde su celular?, ¿tráfico de influencias?, ¿manejo político? Aquí hay varias preguntas por resolver.
El último 17 de noviembre, Álvaro Villarán de la Puente y comerciantes de La Parada, que quedaron fuera del mercado de Santa Anita, se reunieron en el restaurante-bar del hermano de la alcaldesa Susana Villarán, en Miraflores.
La persona que propició esta cita fue Manuel López Mejía, conocido en el centro
de abastos mayorista, como un “operador logístico”, quien estaría ligado a esta
gestión edil. Él estuvo el día en que los comerciantes dedicados a la venta de tomates, le entregaron una coima de 15 mil soles a José Valdivia Chumpitaz, asesor de EMMSA.
Manuel López Mejía sería una persona con influyentes contactos en el municipio
de Lima. Es por esa razón que los vendedores mayoristas de tomate lo buscaron
ansiosos para que él los llevara, directo y sin escalas, hasta la persona clave
que ejerciera algún tipo de poder en EMMSA. Y es que sólo así ellos podrían
obtener un puesto nuevo en el pabellón Belmont saltándose el correcto proceso de
adjudicación.
Fue así que, Manuel López Mejía, los llevó a conversar no con el gerente general de EMMSA, Rafael Gómez, sino, con Álvaro Villarán, nada menos que el hermano de la alcaldesa de Lima, Susana Villarán.