Los años llegan y las huellas de la edad se hacen evidentes. Después de las fotografías filtradas de una de las chicas de la farándula local sin retoque digital, otra de las víctimas, ahora a gran escala, ha sido la cantante pop Madonna, quien nuevamente ha sido obligada a mostrarse tal cual es al mundo entero, cortesía de nuevas imágenes que la muestran sin la ayuda del Photoshop.
La presente sesión pertenece a la revista Interview, realizada por Mert & Marcus, en la que la cantante posó con crucifijos, cigarros y algunos esqueletos.
Por supuesto que la crítica no va por el lado de las arrugas de la cantante, naturales en una persona de 56 primaveras, sino, por la necesidad de vender lo que no es. Si hay arrugas, a mucha honra. Así son las personas reales, no necesariamente los estereotipos de las revistas.