Dicen por ahí que a la cadena de televisión HBO se le habría escapado un "pequeño" detalle sobre el origen de Jon Snow. La verdad es que no sabemos si fue algo casual (aunque tratándose de Game of Thrones, dudamos) pero pueda que algo de cierto haya en ello.
Desde antes que se transmita el capítulo 10 de la sexta temporada, mucho se especulaba sobre los verdaderos padres de Jon Snow y que lejos de ser hijo de Ned, llevaba sangre Stark por su madre, pero también Targaryen. En el citado episodio se confirmó lo primero mas no lo segundo, aunque para algunos, no nos hizo falta y simplemente asumimos que era hijo de Rhaegar Targaryen.
Para aquellos que no…¡sorpresa! Porque efectivamente, ese sería su padre biológico y una infografía oficial del blog del canal lo confirma:
A quien no le quede totalmente clara la historia detrás de este personaje, pues te lo resumimos así.
Lyanna Stark, la única hija del Lord de Invernalia, estaba comprometida con Robert Baratheon pero no era el único pretendiente que al parecer tenía. Los rumores que contó el mismo Meñique en cierto capítulo indicaban que el príncipe Rhaegar Targaryen (hermano de la Khaleesi), ignoró a su esposa cuando ganó cierto torneo y le ofreció su corona a Lyanna. Tiempo después se esparció la noticia que Rhaegar había secuestrado a Lyanna en Dorne, algo que motivó la rebelión de Robert contra el Rey Loco Aerys Targaryen.
Cuando Ned Stark llega a Dorne, encuentra a su hermana secuestrada en un baño de sangre en La Torre de la Alegría y Lyanna le cuenta los orígenes de este bebe antes de morir, pidiéndole a su hermano que lo proteja. Es por ese motivo que Ned jamás habló sobre los verdaderos padres de Jon (por las consecuencias que podría traer pues recordemos que Robert Baratheon no hubiera pensado dos veces en matarlo) así que lo crío como hijo suyo, algo que no cayó muy bien a Catelyn Stark.