Por: Daniela C.
La vida de Jennifer Lawrence pendió de un hilo durante el fin de semana porque el avión que la transportaba de su natal Louisville, Kentucky a Nueva York presentó una falla en ambos motores.
El representante de la actriz confirmó al portal de TIME los sucesos y dio más detalles del mismo. El avión en el que se encontraba, el cual volaba a una altura de 9 mil metros, presentó una falla en uno de los motores, lo que obligó a los pilotos a cargo a buscar un aeropuerto dónde aterrizar.
Sin embargo, mientras se dirigían a Buffalo, Nueva York para el aterrizaje de emergencia, el segundo motor del avión falló. Felizmente para todos, ni la oscarizada actriz ni nadie de la tripulación resultó herido, aunque imaginamos que fueron momentos muy tensos para todos los presentes.