Cuando Hollywood
anuncia una película basada en un videojuego,
las expectativas de los gamers
llegan a ser muy grandes. El que menos suele pensar que la trama será tal cual
se ve en una consola de entretenimiento,
sin embargo en muchas ocasiones, las historias no han dado la altura de lo que
se espera siendo en realidad un fiasco
total.
Mira a continuación 5 ejemplos:
Street Fighter: La
Última Batalla (1994)
Esta fue la primera película en carne y hueso del mítico juego de lucha. Lo más fiel, por decirlo de alguna manera, fue la apariencia de los actores según el personaje que le tocó representar, después de eso, todo estaba mal. Aquí, el villano Bison es interpretado por el fallecido Raúl Julia quien lamentablemente es demasiado histriónico y no impone nada de respeto, más bien da risa. Blanka es ahora un monstruo genético cuidado por el doctor Dhalsim; mientras que Chun-Li, Balrog y Honda se han convertido en un trío de periodistas. Y para rematar la trama, Ryu y Ken se dedican a la estafa y al timo comercial. Un film que resultó toda una decepción para los fieles fans de los luchadores callejeros.
Street Fighter: La
leyenda de Chun-Li (2009)
Ah, pero si pensaste que ya habían aprendido la lección
luego de este fatídico film, te equivocas. Quince años después nos llegó una nueva
adaptación cinematográfica del juego de Capcom,
esta vez titulado Street Fighter: La
leyenda de Chun-Li. El resultado no pudo ser peor. Arrancamos a ver todo lo
malo empezando por Vega,
interpretado por Taboo de The Black Eyed
Peas. Seamos francos ¿Por qué ponerlo a él en un personaje el cual, según Capcom, es el ser más bello de su
historia? Luego tenemos a Bison, quien
a falta de tener los ojos en blanco, no se parece en nada al personaje, por lo
que podría haber sido cualquiera y para colmo resulta que tiene una hija. Y por
último, Gen quien ¡oh sorpresa! ha
descubierto el elixir de la vida.
Doble Dragon (1994)
El mayor reclamo de esta adaptación es ver a Alyssa Milano como una rubia oxigenada de
pelo corto en el look más fatal de toda su carrera. Por lo demás, la trama no
tiene nada que ver con el juego, además de encontrarnos con los gemelos
protagonistas que de gemelos no tienen nada y que manejan un repertorio de
escenas de artes marciales bastante falsos. Seguramente los realizadores de la
película pensaron que por poner al villano de Terminator 2 ya tenían el éxito asegurado. Double Dragon o Doble Dragón nos dejó doblemente decepcionados.
Tekken (2010)
La adaptación de Tekken
fue una creadora alucinante de relaciones personales, apariencias físicas y
biografías que nada tenían que ver con las del videojuego. ¿Amor entre Jin
Kazama y Christie Monteiro? ¿Nina y Anna Williams, concubinas de Kazuya? Sí, como lo lees. ¿Steve Fox rapado? Sí, le dio por
cambiar de look. Y así una larga enumeración de incongruencias que nos hacen pensar
¿Para qué compran una licencia si no van a respetar los detalles más básicos?
Super Mario Bros (1993)
Y aquí la peor de todas. Super Mario Bros, donde podrás ver
a Bowser convertido en Dennis Hopper
con el pelo rubio y en punta. ¿Y qué podemos decir de un par de fontaneros
italianos que tienen menos pinta de ser italianos?
Pero ojo, no queda ahí la cosa, ya que las palmas se las
llevan los goombas, convertidos en
una suerte de dinosaurios retrasados con
gabardina. ¿En qué pensaba Bob
Hoskins, ganador del Globo de Oro y
nominado al Oscar, al aceptar participar en este largometraje? Dicho sea
de paso, el propio Hoskins ha
reconocido en repetidas ocasiones que se trata de la peor película que ha hecho
en toda su carrera.
Lo único que esperamos es que para Assassins Creed y Warcraft no sucedan los mismos fiascos, que respeten a los personajes tal cual los
conocemos y sean, en la mayor cantidad posible, fieles a la historia.