Por: Daniela C.
Algunos actores llegan a comprometerse tanto con sus papeles que una vez que se apagan las cámaras les es difícil disociarse de la persona que interpretan. Y en el caso de Michael B. Jordan fue justamente aquello lo que le pasó cuando interpretó al villano Erik Killmonger en 'Pantera Negra'.
Según lo que contó el mismo actor durante el podcast de Bill Simmons, Michael B. Jordan se metió tanto en la piel de su personaje que necesitó de terapia para poder dejar atrás a Killmonger y seguir con su vida:
"Fue una de esas cosas que no sabía lo que estaba pasando. Nunca estuve en un personaje durante un período de tiempo tan largo y fue, supongo, tan oscuro, tan solitario, tan doloroso. Así que al salir de eso, pensé: 'Oh, sí, negocios como siempre. Regresaré a casa, me cortaré el pelo y todo volverá a la normalidad".
Pero lo que pasó no fue lo que él imaginó:
"Me encontré en la rutina de estar aislado y me aseguré de que estaba solo y no dije mucho más de lo habitual. Una vez que terminé la película, me llevó algo de tiempo explicar cómo me sentía y por qué me sentía tan triste y un poco deprimido".
Jordan contó que tuvo que recibir ayuda profesional para atravesar sus emociones y finalmente empezó a sentirse como él mismo de nuevo.
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— Cinescape (@cinescape_peru) 29 de noviembre de 2018