Liam Neeson es todo un héroe de acción. Lo hemos visto como un maestro Jedi en Star Wars, como Hannibal en El Equipo A, rescatar a su hija en Búsqueda Implacable, pelear con lobos en Un Día para Sobrevivir y actualmente en cartelera podemos verlo en una encrucijada a 40 mil pies de altura en Sin Escalas.
Ahora, seguro que en algún momento se te ocurrió que Liam hubiera sido un genial James Bond y estamos completamente de acuerdo. Pero tal vez te sorprenderá saber que no fuimos los únicos a los que se nos prendió el foquito sino también a los ejecutivos de la franquicia.
“Fui bastante cortejado, póngamoslo de esta forma.” – comentó el actor a The Mirror – “Estoy seguro que no fui el único y que otros actores también lo estuvieron. Todo sucedió 18 o 19 años atrás y la que por ese entonces iba a ser mi esposa dijo: ‘Si tomas el papel de James Bond no nos casamos’. Y tuve que tomarlo en consideración porque realmente quería casarme con ella”.
Cuando Neeson declinó la oferta, quien la tomó fue Pierce Brosnan, quien retomó la franquicia en 1995 con Goldeneye.