James Gunn marca su posición como jefe creativo de DC Studios: “Yo no soy Zack Snyder”

El cineasta y ahora presidente de DC Studios anticipa que no tendrá choques creativos con el estudio.

James Gunn tiene grandes retos por delante pero desde ya algunos ánimos no tan positivos respecto a la posición que ha tomado para construir el nuevo universo de DC Studios. 

Resulta que el sonado despido de Henry Cavill como Superman será algo con lo que tendrá que cargar y que por ahora ha agitado tanto a los fans del estudio que hasta piden su cabeza. A Gunn no lo quieren en este momento. No quieren que haya tomado la decisión de deshacerse de uno de los pocos actores que realmente entusiasmaba al fandom y menos aún de la visión que Zack Snyder había planteado. Pero mientras los fans siguen asimilando todo ello, al menos, y dentro de todo hay una buena noticia: Warner no se meterá en sus decisiones a diferencia de lo que sucedió con Zack Snyder.

Al respecto, James Gunn ha marcado su posición respecto a lo que tuvo que pasar Snyder en aquel momento. Es bien sabido que Zack batalló en varios puntos con el estudio, cediendo en muchos aspectos que finalmente, no fueron las decisiones más acertadas. En este sentido, James Gunn anticipa que aquello no va a suceder.

“Mi posición es diferente a como era con Zack. Yo no soy Snyder. Peter y yo somos los jefes de DC Studios, la única injerencia que podría haber… ¡Sería nuestra!”

Según había comentado en sus propias redes sociales, Gunn ya presentó su plan a David Zaslav, el presidente de Warner Media, y una vez aprobado, tiene el camino libre para trabajar. No imaginamos que no vayan a existir ajustes si sucediera el caso que las películas empiecen a fallar en la taquilla, pero por lo pronto, tiene la bendición del estudio y libertad creativa.

Por ahora, todo parece indicar que estaremos frente a un reboot completo, y mientras hay quienes no están de acuerdo, otro grupo entiende que es necesario construir de cero ya que de otra manera todo quedará muy desordenado nuevamente. Ahora Gunn tiene el enorme reto de hacer que su planteamiento funcione. ¿Lo logrará?

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