Muchísimos se apuntaron al estreno de Cincuenta Sombras de Grey, de hecho, abarrotaron salas por doquier (en nuestro país llevaron a 56 mil efervescentes almas al cine) pero dos personas que de todas maneras no estuvieron durante estas primeras funciones han sido Jamie Dornan y su esposa Amelia Warner.
El inglés actor contó recientemente a USA Today que su esposa es la última mujer en la Tierra que quiere ver la película de corte erótico y él, por supuesto, lo entiende. ¿Qué mujer querría ver a su esposo interpretar a un personaje adicto al sexo sadomasoquista – que incluso le propina varias nalgadas a su co-estrella, Dakota Johnson?
“Amelia no quiere verlo pero sí quiere apoyarme en mi trabajo. Yo tampoco podré sentarme ahí. No voy a poner ninguna presión en ella de ninguna manera. Sabe que todo es actuación pero probablemente no sea cómodo para ella verlo”.
El actor añade que las escenas con desnudos fueron incómodas de ver desde su propia perspectiva:
“Hay una toma bastante larga de mi trasero. No fue algo que me hizo sentir cómodo cuando lo vi”.
Y parece ser que la incomodidad no solo se vivió cuando vio las escenas ya grabadas, sino en el mismo set:
“En la escena en la que los personajes hacen el amor, habían probablemente 10 ó 15 personajes en la habitación. Era una toma muy íntima en un escenario para nada íntimo” – dijo la directora Sam Taylor-Johnson.
Para los que ya lo vieron…¿Se notó la poca ‘intimidad’?