París vivió un viernes sangriento
El pasado fin de semana la capital francesa fue escenario de múltiples atentados terroristas que dejaron un saldo de al menos 127 muertos.
La 'ciudad de la luz' se convirtió en la 'ciudad de la sangre' en nombre de un falso Alá.
El autodenominado Estado Islámico asumió la autoría de los 7 atentados en París que han dejado un saldo, por el momento, de 129 muertos y 300 heridos al 99 en estado crítico. ISIS es un grupo terrorista yidahista es decir, islamistas radicales, extremistas con agenda política y trasnacional.
El presidente de Francia, François Hollande calificó los atentados de barbarie absoluta y de actos de guerra, y señaló al Estado Islámico como responsables.
"El país está en pena pero no nos temblará la mano", dijo el presidente francés quién asegura que el país se enfrenta a una dura prueba de unidad y sangre fría. Al tiempo que ha anunciado una guerra implacable contra el terrorismo yihadista.
Según ha informado el procurador de la república gala, se estima que al menos participaron tres células terroristas perfectamente coordinadas.
Una de ellas en las inmediaciones del Estadio de Francia donde se celebraba un partido amistoso entre Francia y Alemania y de donde fue evacuado el presidente François Hollande y más de 4000 aficionados
Otra célula habría sido la encargada de repartir terror y balas en 4 restaurantes de la Rive Gauche, al parecer los terroristas disparaban indiscriminadamente desde un coche ambiental y otra célula integrada al menos por cuatro terroristas ingresó a la sala de conciertos Bataclan donde han fallecido más de 100 personas.
Al menos cuatro terroristas ingresaron disparando a mansalva y gritando arengas en nombre de Alá y de los hermanos caídos en Siria. Algunos de los asistentes murieron en el acto, otros lograron escapar de la sala, y otros, fueron tomados como rehenes. Las fuerzas de seguridad francesas intervinieron, tres terroristas se inmolaron detonando los explosivos que llevaban adheridos al cuerpo y otro resultó abatido.
En el comunicado donde los yihadistas sunis reivindican la masacre, aseguran que los objetivos fueron minuciosamente elegidos. Apuntaron contra gente común, mayormente jóvenes que simplemente disfrutaban de un concierto, un trago o un plato de comida, pero esto para ISIS representa las abominaciones en plural y la perversión.
Las razones de por qué Francia es un objetivo de ISIS o del yihadismo en general, son muchas. Hay que tener en cuenta, por ejemplo, que ahí se asienta una de las mayores comunidades musulmanas de Europa. Muchos de ellos, además, nacionalizados franceses hace varias generaciones ya que la Francia tuvo colonias y protectorados como Argelia y Marruecos y en la actualidad se ha convertido en el país de occidente que más yihadistas produce.
ISIS postula que el mundo se divide en dos: el campo del islam y el campo del infiel. Todos deben someterse a la fe del islam y cualquier opositor debe ser eliminado.