La misteriosa muerte del cadete Gonzales
De su asesinato el último febrero, en un restaurante de Puente Piedra a plena luz del día, solo existe este impactante video de seguridad. De las motivaciones para eliminarlo a balazos y a manos de sicarios poco se sabe aún. El misterioso crimen contra el cadete de la Policía, Percy Gonzales Mendoza.
A las dos de la tarde del pasado domingo 22 de febrero, en un restaurante de El Zapallal, en Puente Piedra, el almuerzo dominguero se vio alterado por un siciario que mató a Jaime Arones Sánchez, empresario de 50 años, y de Percy Gonzales Mendonza, cadete de policía de apenas 23.
Las imágenes de cuatro cámaras de seguridad registran el asesinato a plena luz del día que aún no encuentra explicación para nadie y que ha llamado poderosamente la atención de los medios.
Las tomas de las cámaras del restaurante nos permiten recrear que fue lo
que pasó momentos antes del feroz ataque: a la 1:25 de esa tarde, los tres personajes llegan en una camioneta Hyundai Tucson al restaurante Tusan. Arones, con gorra y camisa clara, baja del asiento del conductor. Del asiento del copiloto baja el padre del cadete con un polo blanco con franja roja. Del asiento de atrás desciende el cadete Gonzales con polo azul. Se sientan en una mesa muy cerca de la puerta de salida y piden la comida.
Desde una de las cámaras colocadas en una de las esquinas superiores del restaurante podemos ver cómo el cadete atiende esta llamada que dura aproximadamente cinco minutos. Como distraído o quizás inquieto, en todo momento hace girar con su mano el llavero de la camioneta. Luego de eso, vuelve al restaurante. Son cerca de la 1:50 de esta tarde. Almuerzan y como un signo de la fatalidad, cerca de las 2:06 Arones levanta la mano pidiendo la cuenta.
Segundos después, un hombre con casco y una mochila en donde va escondida el arma, irrumpe en el local. Va directamente hacia la mesa donde está Arones y los Gonzales, y tira a matar contra él y el cadete.
A Arones le alcanzan seis impactos de bala que le producen la muerte casi de forma inmediata. El cadete recibe dos disparos que también sellan su suerte. El sicario se acerca a rematarlo. Mientras esto sucede, el padre del cadete se salva de milagro. Ante el ataque se para como un resorte y busca protección en una columna que, sin embargo, le permite ver todo lo que ocurre.
Los móviles de este feroz ataque aún no han sido esclarecidos. Si bien todas las hipótesis se manejan en la nebulosa, queda claro que los sicarios de estas imágenes no actuaron solos.
Día a día, el sicariato y el raqueteo parecen ganar terreno en esta ciudad. Hace unos días, se supo que un presunto sicario de apenas 19 años, Alejandro Santistevan Guzmán, apodado Tiro Flojo, implicado en el asesinato de una persona, fue liberado en menos de 8 horas de la comisaría de Huayrona.
Pese a que cómo lo muestra el video de este reportaje, amenazó con disparar a los transeúntes que pasaban por la zona de discotecas de San Juan de Lurigancho.
Enfocar y perfeccionar la lucha contra el sicariato y el raqueteo como se hizo en su momento contra el robo de bancos y los secuestros podría ser la alternativa. Mientras tanto, la sensación de inseguridad parece ser lo único concreto.