Desastre en Bagua: los terribles alcances del derrame de petróleo
El derrame ha afectado quebradas y, según algunos medios, ha llegado incluso a afluentes y ríos
En menos de dos semanas, la Amazonía peruana se ha visto afectada por derrames de petróleo en el Oleoducto Norperuano. El 25 de enero, se produjo un primer derrame a la altura del kilómetro 440 del ramal norte de este oleoducto, en el distrito de Imaza ubicado en Bagua, Amazonas.
Un segundo derrame se registró el 3 de febrero pasado en la provincia del Datem, del Marañón, en Loreto. El derrame ha afectado quebradas y, según algunos medios, ha llegado incluso a afluentes y ríos. En el caso de Amazonas, al río Chiriaco y en Loreto, al río Morona, ambos afluentes del imponente río Marañón.
Lo dice Rodrigo Lazo, antropólogo de la Universidad Católica, que hasta la semana pasada estuvo en Bagua. El derrame, la fuga, o como quieran llamarlo, no solo ha afectado a las quebradas y ríos de estas dos zonas del país, también los cultivos de los agricultores del lugar. Los afectados alcanzarían en esta primera etapa a 8 mil personas en las dos regiones, según estimados de voceros locales.
Como dice Germán Velásquez, presidente del directorio de Petroperú, ya se han iniciado las labores de limpieza de las zonas. Sin embargo, las cosas no son tan sencillas. Según lo que nos dijo Velásquez, el petróleo derramado equivale a 3 mil barriles, dos mil en Amazonas y mil en Loreto. Sin embargo, según él, solo han podido recoger por el 30% de ese total.
La situación coloca en una posición muy delicada a Petroperú ya que no es la primera vez que derrames de petróleo como estos ocurren. En el 2014, se produjo un derrame cerca de la localidad de Cuninico en Loreto, con el posterior impacto en la flora y fauna de la zona.
Petroperú tendría hasta el 29 de marzo de este año para demostrar que cumplieron con las labores de restauración en ese lugar. De no ser así, recibirían una multa cercana a los 60 millones de soles por parte del Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA).
Cerca de 300 personas realizan las labores de limpieza de la quebrada cercana al río Chiriaco. Algunos medios de comunicación, e incluso el propio antropólogo Rodrigo Lazo, han denunciado que menores de edad están participando en la limpieza de estos residuos contaminantes exponiendo su salud.
¿Ha llegado el petróleo hasta los ríos afluentes del Marañón? Algunos medios sostienen que sí. La OEFA, por lo pronto, ha identificado en Loreto petróleo en las aguas del río Morona. German Velásquez de Petroperú rechaza estas afirmaciones a pesar de las evidencias que no son pocas.
Lo sucedido en la Amazonía peruana no es juego ni poca cosa. La remediación total del daño causado podría tomar más de un año.