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Olinda (Nidia Bermejo) se dio cuenta de que Juana (Natali Zegarra) estaba hablando muy cerquita de Miguel Ignacio (Sergio Galliani) afuera de la casa Gonzáles, por lo que decidió advertirle sobre el empresario. Cuando la joven secretaria entró al domicilio, se encontró con su primera, quien visiblemente fastidiada, le preguntó cuáles eran sus intenciones con el ex yerno de Francesca.
"¿Qué tanto hablabas con la vizcacha estreñida? Así le decimos en la casa. ¿De dónde lo conoces? Habla", consultó la esposa de don Gil y a lo que su prima le confesó que lo vio en la corporación Maldini. "Lo conocí en la corporación Maldini, solo le estaba saludando", respondió.
En ese instante, Olinda le recalcó que Miguel Ignacio no es buena persona y le contó que fue él quien derrumbó la anterior casa de los Gonzáles. "Te advierto, ese señor es un malvado. Ya casi lo estaba convenciendo a mi Gilgarito para que entrara a un negocio bien raro. ¿Tú sabías que él es el que les tumbó la casa a la vez pasada?", expresó.
Juana se hizo la loca y le aseguró que el empresario siempre fue bueno con ella. Sin embargo, Olinda continuó advirtiéndole. "Con Xavi ya te advertí, y la señorita no me hizo caso. Entonces...", dijo y a lo que la popular 'Juanacha' la interrumpió, resaltándole que no se preocupe, pues ya aprendió y no se acercará a él.
Juana no imaginó encontrarse con Miguel Ignacio afuera de la casa de los Gonzáles y cuando él le preguntó si pertenecía a la familia, ella lo negó rotundamente. Incluso, no tuvo reparo en insultar a los seres queridos de Olinda con tal de quedar bien parada frente al empresario.
"Yo recién estoy viviendo en esta casa. (¿Eres una Gonzáles?) No, yo soy prima de Olinda. Estos chismosos escuchan de todo y después le pueden hacer un alboroto con los salvajes que son. Si son unos malcriados, chochinos, impresentables, bullangueros, ladrones", expresó la joven secretaria sin piedad.
Tras escuchar sus palabras, el empresario le consultó el porqué vivía con los Gonzáles si tenía dicho concepto de ellos. "Por motivos de fuerza mayor, es que como me quedé sin trabajo y ya no me alcanzó para pagar el alquiler del otro lugar donde estaba. Lo bueno es que, a pesar de vivir con esta gente, tengo el gusto de encontrarme con usted", señaló.
Olinda salió corriendo de la casa para buscar a Juana, a quien había rechazado ayudar, para darle una nueva oportunidad. Y es que la esposa de don Gil no pudo ser indiferente con su prima al verla en las peores condiciones, ya que no tenía donde dormir y había sido embarrada con barro de la peor manera.
"Quise darte una lección, pero, en verdad, lo que debía darte es mi apoyo. Perdóname. Mira, vamos a hacer algo, vamos a ir a la casa, vamos a juntar a toda la familia, vamos a contarles toda tu situación, lo más bonito que se pueda", señaló la esposa de don Gilberto.
"(Yo no te quiero incomodar, déjame sola aquí y triste, es lo que me he ganado) no, claro que no, si realmente estás arrepentida mereces otra oportunidad Al igual que yo, todos entenderán y te perdonarán", añadió Olinda y, rápidamente, Juana se emocionó hasta las lágrimas. La secretaria saltó de alegría y resaltó que su prima era la mejor.
Juana le confesó a los Gonzáles que padece de una condición que la hace robar. "Tengo algo que confesarle. Soy cleptómana. Es verdad. Las personas de mi condición no pueden controlar sus impulsos por coger las cosas que no son suyas", dijo y a lo que el resto de la familia no le creyó; sin embargo, no tuvieron otra opción que aceptarla nuevamente en su hogar.
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