Rubí culpó a su mamá y hermana por su frustrada boda con Miguel Ignacio

Rubí (Anahí de Cárdenas) está en su casa totalmente devastada por su frustrada boda con Miguel Ignacio y justo llegan su mamá y hermana muy afectadas por su secuestro. Violeta le cuenta a su hija que Milagros (Cindy Díaz) no le hizo caso en tomar un taxi seguro y en la calle unas delincuentes se las llevaron.

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Rubí entonces acusa a su hermana como culpable de que no se haya casado con Nachito y les cuenta que en la limusina recibió una llamada pidiendo dinero por su familia.  

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Ella no iba a permitir cargar con sus muertes en su conciencia y asegura que debió haberse casado porque su ‘sacrificio’ fue en vano, ya que su familia está sana y salva.

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Rufina jura por su vida que no volverá a preocuparse por alguna de ellas y se va llorando, advirtiendo que no las quiere volver a ver. 

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Mientras tanto, ella fue a buscar a Miguel Ignacio y se arrodilló ante él para pedirle que la perdone. Lamentablemente, Nachito jamás podrá olvidar la terrible humillación que le hizo vivir, por lo que la botó de su oficina.

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