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El Callao podría convertirse en la "Tierra de Narcotraficantes"
Narcotraficantes podrían apoderarse del Callao
El Jueves Santo pasado, disparos y estallidos de granada irrumpieron en una tranquila zona de San Miguel, donde se registró un atentado de dimensiones sorprendentes.
Las imágenes captadas dan cuenta de un atentado semejante a los actos perpetrados por el terrorismo en décadas pasadas. Sicarios usaron armas de largo alcance y granadas.
Las imágenes incautadas del celular de uno de los heridos, Carlos Sulca Cruz, revelan que lo que ocurrió ese sangriento jueves de santo no tiene nada.
En esta historia se entremezclan los lujos, la droga, las mujeres y mucho, pero mucho dinero.
Fiestas con orquestas de curvilíneas mujeres como son tentación eran ya comunes en la casa de Gerald Oropeza López, una propiedad de casi 4 mil metros cuadrados ubicada en la calle José León Barandarián en la exclusiva zona de la Planicie.
Su costo es nada menos que 2 millones 100 mil dólares, pero fue incautada por el Estado y tras un largo proceso judicial fue transferida a la Comisión Nacional de Bienes Incautados – Conabi.
La noche del atentado, Gerald Oropeza, como era costumbre estaba acompañado…en su costosa camioneta Porsche blanca valorizada en 214 mil dólares iban Carlos Sulca Cruz y Juan Fidel Berrios Navarro. Además dos mujeres y Patrick Zapata Coletti.
El celular de Sulca Ríos incautado por la policía la noche del atentado también contiene conversaciones reveladoras por Whatsapp.
Se trataría de coordinaciones entre Gerald Oropeza y un ciudadano italiano de nombre Emmanuelle que se hace llamar Sasa, al mismo estilo de la película "Caracortada", Oropeza López es llamado por él, el Tony Montana peruano, como el capo cubano de la droga en la ficción, pero que tendría su versión en la vida real nada menos que en Oropeza, la policía presume que las coordinaciones son por un envío de droga al extranjero.
Aunque se ha deslizado la posibilidad de que Sasa estaría detrás del atentado, para el analista Jaime Antezana, los interesados en desaparecer a Oropeza López están en Perú y
la pugna de los clanes del narcotráfico en nuestro país está llegando a niveles comparables con México y Brasil.
Las firmas del narcotráfico se cuidan cada vez menos de esconder su poderío y temeridad, para ellos de día o de noche las cuentas se pagan. Los analistas coinciden en que si esto no se detiene con medidas efectivas, nuestra capital y principalmente el puerto del Callao, será, en muy poco, tierra de nadie.
